A pesar de que el margen de maniobra era escaso por la falta de tiempo y las obligaciones contractuales, Compromís ha conseguido avanzar en la «valencianización» de la Batalla de las Flores de este domingo. Aunque los grandes cambios no llegarán hasta la edición del año que viene, de momento el ayuntamiento ha decidido que la Senyera sea el fondo de buena parte de las fotografías que se tomen este domingo. Esa, al menos, es la intención que tiene el concejal de Fiestas y Cultura Popular, Pere Fuset, que como novedad, y como declaración de intenciones, anunció ayer que las banderas de España que cubrían antes los palcos que se sitúan a lo largo de la Alameda y entre los cuales discurre el desfile de carrozas, estarán ahora decorados con una Senyera «estatutaria» de grandes dimensiones. Según Fuset, de esta forma será más fácil identificar que la Batalla de las Flores es «una fiesta única que se celebra en Valencia y no en cualquier otro punto de España», cuando aparezca en los medios de comunicación. «Además, es lo más apropiado para un acto valenciano», argumentó el concejal de fiestas.

Esta decisión «es un paso más en nuestra intención de valencianizar la fiesta», dijo Fuset. Compromís siempre ha abogado por recuperar la tradición en los festejos populares y, sobre todo, su carácter más valenciano. Así anunciaron que lo harán en las Fallas y así lo van a hacer también en la Batalla de Flores. La Senyera no será la única declaración de intenciones, ya que la música también estará marcada por la valencianía. La amenización musical correrá a cargo de grupos autóctonos, tanto en la previa del evento como durante la Batalla. Sonarán instrumentos tradicionales como la dolçaina pero también grupos de folk o rock en valenciano, entre otros.

Todo esto no será más será la antesala del cambio y la «apertura» que Fuset quiere imprimir en esta batalla a partir del año que viene, cuando celebrarán su 125 aniversario (en realidad es este año cuando se cumple esa efeméride pero quieren contar la primera edición como «año cero» para convertirla en una cita histórica». Las intenciones del nuevo consistorio pasan por ampliar el evento para abrirlo al público en general y fomentar la participación de todo tipo de asociaciones y entidades de la ciudad para convertir la Batalla en una «oportunidad de cohesión» .

Nuevos invitados

Como marca de los nuevos tiempos, por primera vez el Ayuntamiento de Valencia ha invitado a la Batalla al Tribunal de las Aguas, al Ateneo Mercantil y la Sociedad Coral 'Micalet. También se ha invitado al Consell Valencià de Cultura y a la Academia Valenciana de la Llengua, instituciones que durante el gobierno popular no solían asistir a esta fiesta.