El robo de bicicletas de Valenbisi va en aumento. De hecho, 466 bicicletas del servicio público de alquiler han sido sustraídas de enero a junio de este año, lo que supone un 30% más de robos que en 2014, un año que contabilizó 630 vehículos robados en total. Por ello, la empresa que gestiona el servicio (JC Decaux) se reunió con la concejalía de Movilidad Sostenible y Espacio Público que dirige Giuseppe Grezzi para mostrarle su preocupación ante un vandalismo que lejos de ir a menos, va a más. El edil responsable, por su parte, se ha comprometido a incrementar la vigilancia en aquellas estaciones que registran un mayor número de robos y actos vandálicos a bicicletas de Valenbisi.
Los infractores, además, no pueden ser identificados según el sistema de seguimiento que tiene la empresa gestora ya que rompen el anclaje o el cuadro del anclaje, una tarea que no es sencilla.
Eso sí, la mayoría de bicicletas que desaparecen, vuelven a aparecer al tiempo tiradas en alguna parte. De hecho, este año ya se han recuperado 445 bicicletas de las 466 robadas, una cifra que, según la concejalía de Movilidad Sostenible, es la mismo cada año. Una vez recuperado el vehículo, éste se lleva a los talleres que tiene JC Decaux en la ciudad para arreglarlas y dejarlas en perfecto estado. El coste corre a cargo de la empresa, que ya le ha solicitado al ayuntamiento medidas para reducir el vandalismo.
La empresa estableció en 2010, cuando asumió el servicio de alquiler de bicicletas, que el usuario debería pagar 150 euros en caso de que le robaran el vehículo. Sin embargo, al arrancar de cuajo el enganche no hay nada que hacer. Además, la empresa pactó con el ayuntamiento que se responsabilizaba de los actos vandálicos ya que «es imposible contabilizar quien ha torcido un manillar o ha sustraído los manguitos». Sin embargo, los datos que manejaba entonces eran bien diferentes. En Sevilla, en 2009, tan solo habían habido tres intentos de robo y, eso sí, más de mil actos vandálicos. En Valencia, en cinco años, han desaparecido unos 400 vehículos, según denunció la empresa adjudicataria.
Las bicicletas de Valenbisi no son convencionales, por lo que la venta de estos vehículos no es una opción que contemple el ayuntamiento. El sillín, las luces, los manguitos, la cesta, el timbre y el pitón cuentan con dispositivos especiales para evitar las sustracciones. Sin embargo, parece que los infractores le hayan pillado el «truco» a romper un anclaje diseñado para dificultar el robo de una bicicleta que pesa 22 kilos.
La empresa tiene en la calle, a disposición del usuario, 2.500 bicicletas del servicio de alquiler, aunque cuando arrancó la contrata esta cuantía se cifró en 2.750. En cuanto el servicio se puso en marcha los usuarios no pararon de subir hasta alcanzar la cifra de 112.000 abonados. En la actualidad son 60.000.
