Las obras de urbanización del Programa de Actuación Integrada (PAI) de Guillem de Anglesola, en el barrio Ayora, finalizarán a principios del año próximo, según anunció ayer el concejal de Desarrollo Urbano y Vivienda, Vicent Sarrià. Se trata de un proyecto que se ha enfrentado a numerosos retrasos en los últimos años. Aumsa recibió el encargo de esta remodelación en 1998 aunque finalmente se optó por la gestión indirecta, que se adjudicó a la mercantil Proara.

Para el concejal socialista, esta obra de urbanización va a suponer «una mejora en la calidad de vida de todo el barrio», dado que se dispondrá de un nuevo jardín que ampliará la primera fase de Guillem de Anglesola, urbanizada en el año 1990. El ámbito de actuación de la unidad de ejecución comprende las calles Jerónimo Monsoriu, Ramiro de Maeztu y Berenguer Mallol, para acabar «con una de las zonas más degradadas del barrio» y sustituirla por un jardín con área de juegos infantiles y solares para edificar un total de 165 nuevas viviendas, de las que 110 serán de renta libre y 55 de de protección pública.

Sarriá destacó ayer que su concejalía está trabajando con los diferentes servicios municipales para sacar adelante los PAI atascados en la ciudad, la mayoría en zonas degradadas y en Ciutat Vella. Así, en el último pleno municipal se impulsó el PAI de la calle Espasa, «que permitirá recuperar para uso público un antiguo refugio de la Guerra Civil».