El concejal responsable del área de Gobierno e Interior y Conservación de Áreas Naturales y Devesa-Albufera en el Ayuntamiento de Valencia, Sergi Campillo, ha cifrado en poco más de seis hectáreas la superficie quemada por el incendio declarado el jueves en la zona de El Saler. "Ha sido un poco más de lo esperado", ha lamentado. Este viernes se ha dado por extinguido sobre las 19.30 horas.

Así lo ha indicado Campillo tras visitar este viernes, junto a los técnicos del Servicio de Devesa-Albufera, la zona afectada por el incendio para hacer una valoración de los daños en el ecosistema del paraje, según ha informado el consistorio en un comunicado. Campillo ha explicado que, debido al fuerte viento del oeste, el fuego se extendió desde el Camino Viejo de la Mallada Redonda hasta las primeras dunas de la zona de los Hierros. "Afortunadamente, la rápida actuación de los equipos de bomberos, policía local, agentes forestales y resto de cuerpos de seguridad y protección, han evitado un desastre mayor", ha recalcado. Sin embargo, ha incidido en que el fuego ha quemado "una importante superficie en muy poco tiempo" como consecuencia de las condiciones meteorológicas imperantes en la tarde del jueves, con un fuerte viento del oeste.

Así, ha detallado que se ha visto el fuego ha afectado a la zona de dunas, a parte del ecosistema litoral de la zona como es la maquia y a especies vegetales como el margallol, el pino blanco, la murta o el enebro marino. No obstante, el concejal de Conservación de Áreas Naturales y Devesa-Albufera ha resaltado que el incendio no ha dañado a la "única" duna que no resultó afectada por el intento de urbanización de la Devesa, la conocida como la Muntanyar de la Rambla.

Campillo ha explicado que, siguiendo los consejos técnicos, el consistorio valenciano va a dejar que la zona se recupere de forma "natural" durante el primer año, aunque señalizará para informar a los ciudadanos de "la importancia de no entrar dentro de la zona para favorecer la recuperación". Tras este primer año, Campillo ha indicado que evaluarán la regeneración natural, se eliminarán las ramas quemadas y, en caso de necesidad, introducirán las especies que no vuelvan a brotar como el pino blanco o el enebro marino. "Queremos hacer un llamamiento a la ciudadanía para resaltar que cualquier precaución es poca y que cuando se vaya al bosque, especialmente en esta época de verano, se han de extremar las medidas de seguridad", ha recalcado el edil.