Hace unos días se cumplieron tres años desde que cesó la actividad en el Col·legi Mayor Lluís Vives, la residencia de estudiantes y profesores de la Universitat de València. La institución académica presentó un ambicioso proyecto de rehabilitación con presupuesto inicial de 14 millones de euros que fue desestimada por el Auintamiento de Valencia. Ahora el activista cultural Antonio Marín Segovia ha solicitado al rector que el centro reabra como centro cultural, oficinas administrativas.

El Col·legi Mayor Lluís Vives es un edificio catalogado Bien de Relevancia Local y es una de las joyas de la arquitectura racionalista de la ciudad de Valencia, que proyectara Javier Goerlich en 1935 siguiendo los parámetros de la residencia de estudiantes de Madrid. «Pensamos que este emblemático edificio podría ser perfectamente reutilizado cuanto menos para reiniciar las actividades culturales que se realizaban históricamente en el Vives, como tertulias, conciertos, conferencias, cineforum, etc, que quedaron interrumpidas en aquel mes de julio de 2012», explica Antonio Marín en un comunciado, que considera que la apertura al público «no supone ningún coste adicional ni debe ser motivo de preocupación para la Universitat de València, pues el edificio goza de una salud envidiable a nivel arquitectónico. De esta manera se evitará la degradación».