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Turismo

A la caza del turista náutico y los yates

Las pernoctaciones en la marina real Juan Carlos I se incrementaron un 4 % en julio - Valencia compite con puertos como Dénia, Gandia o Moraira con precios asequibles de los amarres y busca mejorar servicios con piscina, club de playa y zona comercial

A la caza del turista náutico y los yates

La Marina Real Juan Carlos I se consolida como referente para los dueños de barcos de recreo, veleros y yates que surcan las aguas del Mediterráneo. La política de precios competitivos sumado a los buenos servicios suman a favor de Valencia en cuya marina se registraron el pasado mes de julio 14.000 pernoctaciones, 2.300 de ellas «transeuntes» „estancias inferiores a un mes„, lo que en términos de turistas se traduce en 11.500 personas, lo que supone un incremento del 4% en relación a 2014. Los dueños de los barcos que llegan a Valencia buscando amarres a buen precio, seguridad y servicios de calidad (sobre todo duchas y aseos) se sorprenden en positivo de las prestaciones que encuentran en Valencia.

La política de los actuales gestores de la marina es mantener precios y competir en servicios de calidad, por ejemplo, con extras como piscina, una de las instalaciones con las que contará el futuro club de playa de la marina real, cuya empresa concesionaria está esperando la licencia de actividades del ayuntamiento para poder abrir sus puertas. La idea era que el club de playa, ubicado a caballo entre la dársena y la playa de las Arenas, estuviera abierto este verano pero el retraso en la obtención de los permisos lo ha impedido. El ayuntamiento mantiene paralizadas las obras del club de playa, practicamente acabado, a falta de algunos ajustes en el proyecto. La actividad en el club de playa es nula y las instalaciones, que incluyen terrazas, solarium, piscina «infinity» y restaurante, están cubiertas parcialmente por la arena. El club de playa se encuentra en una de las zonas donde más arena se acumula por el basculamiento de las playas.

Otra de las mejoras que el Consorcio Valencia 2007 quiere introducir para atraer al turística náutico es una zona comercial, que estaba previsto licitar en estos meses. Restauración, baños, lavandería y talleres son servicios habituales que ofrecen los puertos, a los que también se suman ahora wifi, piscinas, puesta a punto del barco o baldeo gratuito de cubiertas.

La marina real de Valencia, con 700 amarres, se ha conseguido estabilizar en una ocupación del 65%. La marina tocó techo con niveles del 80% en la F1 y la Copa del América, cifras que con la crisis y el aumento de la oferta de amarres en la Comunitat (con más de 17.000), no se han vuelto a ver.

En la marina de Valencia se puede amarrar un velero de ocho metros de eslora, una embarcación pequeña, por 7,5 euros al día. Nada que ver con lo que se está pagando por amarrar en los puertos más codiciados del Mediterráneo como los de Baleares, especialmente, el de Ibiza donde la tarifa no baja de 200 euros al día en temporada alta. En Castelló se ofrecen amarres desde 4,2 euros al día en puertos como el de Burriana y en Torrevieja (Alicante) los precios se sitúan en 5,2 euros al día. En Dénia, los precios son algo más elevados que en Valencia. «Dénia es más caro porque es un lugar tanto de fondeo como de baño». «Los barcos que vienen a Valencia no buscan las playas de la ciudad „vienen de sitios como Ibiza, Dénia o Moraira donde las hay mejores„ sino conocer su patrimonio histórico, su gastronomía y comprar», explica Gustavo Benavent, responsable de explotación de la marina real Juan Carlos I.

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