La Concejalía de Educación quiere revisar por completo la gestión y adjudicación de las escuelas infantiles municipales. La intención es que las denominadas escoletes vuelvan a ser gestionadas por cooperativas de profesores, regresando a un modelo que garantice el mínimo coste posible a los padres. Este es el motivo por que el pasado mes de julio suspendió el concurso de adjudicación de gestión indirecta de los centros de Massarrojos y la calle Periodista Ros Belda, que llevan dos años construidos a la espera de su apertura.

Se trata, según la concejal María Oliver (València en Comú), de revisar profundamente el modelo del PP, que privatizó la gestión de nueve guarderías construidas con dinero público. Las dos que faltan por abrir, que se sacaron adelante con dinero del Plan Confianza, costaron 1,7 millones de euros en el caso de Massarrojos y 1,5 millones en el caso de Periodista Ros Belda.

«Es cierto que cuando llegamos al ayuntamiento las dos escoletes habían iniciado ya el periodo de preinscripción para este curso, pero también es cierto que los concursos de gestión que sacó el anterior gobierno salieron con plazos muy ajustados y a los padres se les advertía que era posible que no diera tiempo a su adjudicación. Por lo que su apertura para el presente curso no estaba garantizada y se aconsejaba a los padres que prematricularan a sus hijos en otras escuelas», explica la concejala María Oliver.

La regidora sostiene que los concursos que adjudicaba el anterior equipo de gobierno no diferenciaban entre el proyecto educativo y la propia gestión del centro. «Nosotros queremos cambiar el sistema de baremación y propiciar que se valore más la calidad de la enseñanza. Con el sistema del PP las cooperativas de profesores no podían competir con las grandes empresas que ofrecen un paquete de mantenimiento y limpieza de los centros. Ahora sacaremos pliegos distintos para cada servicio. Ha de primar la calidad de la enseñanza y garantizar el mínimo coste para los padres. Si queríamos cambiar la política educativa municipal, debíamos actuar desde ya», asegura la Oliver. La concejala de València en Comú explica que a principios de 2016 se convocarán los nuevos concursos y que las escuelas entrarán en funcionamiento el próximo curso.

Mientras, el Partido Popular criticó ayer la decisión suspender las adjudicaciones que había en curso, ya que, según explican «ha supuesto la paralización de ambos proyectos».

C's quiere elegir el idioma

Sobre las escuelas infantiles, el portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, defendió ayer la libertad de los padres de elegir la lengua en la que escolarizar a sus hijos. «Es importante que los padres que matriculan a sus hijos en una escuela infantil municipal puedan elegir si se educarán en castellano o valenciano», dijo.