Los vecinos de Ciutat Vella, reunidos en torno a La Boatella y a la Coordinadora de Asociaciones de Ciutat Vella, recibieron ayer el aval de la Policía Local a su idea de unir los tres grandes aparcamientos subterráneos de Ciutat Vella: el de Parcent o Juan de Vilarrasa, el de Ciudad de Brujas y el el del Mercat Central. El intendente jefe de la primera unidad de la Policía Local de Valencia, Roberto González, aseguró ayer, en el curso de una reunión con representantes vecinales, que la entrada de los coches por la calle Santa Teresa y su salida por Barón de Cárcer «no crearía un tráfico exagerado».

Los vecinos continúan así una ronda de encuentros tendentes a presentar en la reunión que las entidades tendrán con Alberto Sanchis, director general de Vivienda, Rehabilitación y Regeneración Urbana, a finales de este mes una propuesta de peatonalización total del centro histórico en torno a la Lonja y a Ciutat Vella. «No queremos una parcial como la que propone el ayuntamiento», explicaron desde la coordinadora.

El «macroaparcamiento» subterráneo obligaría a que la salida se hiciera por Barón de Cárcer, que mantendría un único carril, según la propuesta de los vecinos, de tráfico hacia la plaza de San Agustín. Las aceras se ampliarían y habría más espacio para vecinos y comerciantes. Las plazas del aparcamiento, además, irían destinadas en su totalidad a residentes en la zona, algo a lo que los vendedores del Mercado Central se niegan.