Un carril de circulación compartido, primero con los autobuses de la EMT, luego con las motocicletas y durante la noche con nadie porque los vehículos aparcados impiden su uso. El sector del taxi está dividido en varios sindicatos pero han decidido alzar la voz de forma unánime para exigirle al ayuntamiento que prohiba el uso del carril bus para estacionar los vehículos, al menos, en el centro. Así lo hicieron saber en la Jornada de Movilidad Urbana Sostenible celebrada el pasado martes en el Colegio de Ingeniero de Caminos. Fuentes del consistorio aseguraron ayer que el concejal Giuseppe Grezzi «está dispuesto a estudiar la idea, pero no es algo en lo que el ayuntamiento esté trabajando. Y tenemos muchas cosas en marcha».

Sin embargo, desde el sector del taxi aplaudieron el hecho de que Grezzi, al menos, se interese por esta propuesta que persiguen largamente. «A nosotros no nos molesta que se utilice el carril bus para aparcar en la ronda de tránsitos (Peset Aleixandre, Primado Reig...) pero sí que no podamos 'descargar' a los clientes en la Gran Vía porque no hay ni un hueco. Tienes que dejar al cliente en medio de la calzada, y eso no puede ser. Por eso pedimos que, al menos en el centro, se impida el uso del carril taxi para aparcar», aseguraron ayer desde la Asociación Gremial Autotaxis de Valencia.

Además, desde el sindicato se mostraron partidarios de que se establezcan convenios entre los restaurantes y lugares de ocio con el sector del taxi para aplicar descuentos en las copas si se utiliza este medio de transporte por las noches. De hecho, ya existen en algunos restaurantes de la playa de la Malva-rosa y de la zona de Cánovas. «Así la gente se acostumbra a salir de noche sin su coche particular y todos salimos ganando. Entendemos que desde la hostelería defiendan que se pueda aparcar en el carril taxi, pero es imposible que nosotros lo compartamos porque no podemos realizar nuestro trabajo», apuntaron las mismas fuentes.

Por último, el sector del taxi pidió ayer a Grezzi que estudie «que no todas las calles del centro se limiten a 30 km/h porque para los taxis es una locura» y que se «adecuén los espacios en la calzada para cada vehículos, coches autobuses, taxis, motos y bicicletas porque, de momento, todos circulamos juntos por el mismo carril y es caótico».

La posibilidad de eliminar la medida de aparcar en el carril bus fue recibida ayer con sorpresa y contrariedad por un sector directamente afectador, el ocio nocturno. María Ángeles Fayos, presidenta de la Asociación Valenciana de Empresas de Teatro y Circo (AVETID), llegó a calificarlo de «negativo» en caso de que prosperase la petición de los taxistas. «La Administración nos tiene que ayudar a que la gente vaya al teatro, no perjudicar más a un colectivo muy castigado ya por el tema del IVA», recalcaba Fayos, quien gestiona con su hermano Enrique el teatro Olympia. De ahí que también criticara la apuesta del nuevo equipo de gobierno municipal de «estrechar» en exceso las calles. «A determinadas horas hay que facilitar que la gente pueda llegar a las salas en sus coches, sobre todo gente mayor o con problemas de discapacidad», comentaba. Fayos reclamaba «voz y voto» cuando el consistorio plantee temas que afecten a varios colectivos.

Fomentar el transporte público

Antonio Such, gerente de los Babel y presidente de la Asociación de Exhibidores de la Comunitat Valenciana, mostraba su sorpresa e incidía en que el carril bus queda liberado «cuando no se usa». «No lo entiendo, sobre todo si antes no se fomenta el transporte público porque lo del metro de Valencia por la noche es una cosa graciosa», apuntaba. «Si hay autobuses cada veinte minutos a esas horas de la noche, no hay problema en aplicar ese tipo de medidas, pero no es el caso», advertía. «Hoy por hoy sin un transporte público potente nocturno no tiene mucho sentido, sobre todo por el ocio focalizado en el centro», reiteraba. «Si finalmente el coche particular no puede aparcar en ese espacio nos perjudicaría», recalcaba.