Otra noche fuera de las camas. Los vecinos de la Creu Coberta pasaron, en la madrugada del viernes al sábado, varias horas en las proximidades de una conocida discoteca junto a la antigua fábrica de Cervezas Turia para denunciar la situación que viven los fines de semana con botellón hasta altas horas de la madrugada.

El presidente de la Asociación de Vecinos Bulevar Sur-San Vicente Mártir, Elías Sánchez de los Silos, explicó ayer que la policía acudió a la concentración con un medidor de decibelios para comprobar el sonido que salía de la discoteca era el adecuado.

«Vamos a pedir más mediciones porque creemos que el anterior ayuntamiento autorizó la discoteca sin tener en cuenta que dentro hay placas de uralita» que amplificarían el sonido, explicó el dirigente vecinal. La concentración terminó en torno a las tres de la madrugada del sábado.