El director general de la Vivienda, Alberto Sanchis, comunicó ayer a los vecinos de Ciutat Vella su propósito de introducir unas nuevas tarifas para los alquileres de viviendas públicas basadas en los ingresos de las familias. De esa manera se podrían ahorrar entre un 30 y un 50 por ciento de las mensualidades.

Desde hace unos años, los inquilinos de viviendas públicas viene reclamando una rebaja de los alquileres para adecuarlos a la renta libre, que ha caído notablemente por la crisis, e incluso bajarlos. El anterior equipo de Gobierno ya planteó un descenso, pero ayer, durante la reunión de las asociaciones de vecinos de Ciutat Vella con Alberto Sanchis, éste les informó de la posibilidad de acogerse a otros criterios de pago. Si hasta el momento dependía de los módulos y del coeficiente que aplicara cada municipio, ahora se podrá optar también por acogerse a criterios de renta. Es decir, pagar según los ingresos. Y eso supondrá una rebaja de los alquileres de entre el 30 y el 50 por ciento.

Los vecinos también arrancaron un compromiso para la futura peatonalización del entorno de la Lonja, el Mercado Central y los Santos Juanes. La Generalitat se propone cumplir la Ley de Patrimonio y los planes de protección de los entornos monumentales. Por tanto, estará presente en la comisión que se creará al respecto. También existe un compromiso para salvar las construcciones que rodean la Lonja.