Aficionados a la escalada furtiva de edificios colocaron ayer un pañuelo negro en una de las figuras que coronan la Puerta de los Hierros de la catedral. Lo hicieron arriesgando su propia vida y sorteando el fuerte dispositivo policial que suele haber en las inmediaciones. Y todo para dar a conocer, al parecer, su actividad, muy de moda en todo el mundo pero discutible cuando se trata de monumentos históricos.

A simple vista es difícil verlo. La estatua está colocada en la cubierta de la Puerta de los Hierros, en la parte izquierda, junto a la torre del Micalet, a unos 15 metros de altura. Además, el pañuelo es de color negro y está ajustado al cuello de la figura, lo que lo hace menos visible.

Una llamada a este periódico, sin embargo, reivindicó la «hazaña». Una voz anónima se identificó como miembro de un grupo de jóvenes que se dedica a la escalada de edificios en la ciudad. Esta acción pretendía, por tanto, dar a conocer su afición, muy extendida en otras ciudades y en edificios de gran altura pero menos habitual en edificios de alto valor patrimonial como es la catedral de Valencia. La Puerta de los Hierros es de un floreciente estilo barroco.

Lo más sorprendente de esta acción es que ha pasado desapercibida al fuerte dispositivo policial que hay en las proximidades. Según fuentes oficiales, en la Plaza de la Reina, donde está la Puerta de los Hierros, hay siempre dos policías de vigilancia y otros dos en la vecina Plaza de la Virgen. Se baraja, por tanto, la posibilidad de que se hiciera de noche o aprovechando un relevo de las patrullas.

La llamada anónima recibida en este periódico no concretó ni el modo ni el objetivo que perseguían al interrumpirse precipitadamente.

Desde hace años, la protección del patrimonio ha sido un quebradero de cabeza para las autoridades municipales. «Atentados» en la Lonja o en la Puerta de los Apóstoles de la catedral han desatado las alarmas, por lo que siempre está en el aire la opción de poner cámaras de seguridad. En la Lonja, por el momento, se ha puesto una vigilancia continua.