Las comisiones de falla iniciaron ayer el particular cursillo para conocer, de mano de falleros expertos en la materia (Manuel Sanchis y Quique Almero) la necesidad de presentar declaraciones a Hacienda, dentro de la nueva normativa ministerial, que ahora incluye a las asociaciones sin ánimo de lucro. Ayer empezaron a desfilar por la sede fallera representantes de comisiones. Entre las líneas maestras de lo enseñado destaca la necesidad de abandonar la precariedad contable y pasar a tener un sistema financiero perfectamente organizado, algo que acabará por obligar a no pocas comisiones a ponerse en manos de gestores profesionales. Las fallas dispondrán de asesoramiento del colegio de economistas para resolver cualquier duda al respecto. La enorme heterogeneidad de las comisiones, que incluyen, por ejemplo, distintos tipos de ingresos y de propiedades de bienes inmuebles prevé que cada declaración será una historia diferente. Sobre todo, se les insistió en la necesidad de abandonar la táctica del «me han dicho» y poner las cuentas en manos profesionales, aunque sean falleros de la propia comisión, para evitar cualquier conflicto posterior. Las comisiones tributarán ya en el presente ejercicio.