Si el nuevo alcalde de Valencia, Joan Ribó, apelaba ayer a la "unidad" en vistas a la festividad del 9 d'Octubre, los hay que ya han mostrado su postura de cara al Día de la C. Valenciana que se celebra este viernes. En uno de los laterales del nuevo cauce del Túria, que discurrre pegado a la V-30, ha aparecido una pintada en la que se acusa al munícipe de "traidor" acompañado del mensaje "Stop catalanisme" y una cruz céltica, símbolo asociado movimientos de extrema derecha e idéntica a la que mostraron en algunas banderas en la Procesión Cívica del año pasado.