El servicio jurídico del Colegio de Fisioterapeutas de la Comunidad Valenciana (Icofcv) ha solicitado al Ayuntamiento de Valencia que abra expediente sancionador a los responsables del servicio de masajes ofertado este verano en las playas de la Malva-rosa y del Cabanyal dado el grave peligro que conlleva para la salud de los usuarios, tal como constatado el colegio.

La entidad denuncia que en dicho servicio, bajo concesión administrativa del consistorio valenciano, se están realizando actos terapéuticos propios y exclusivos de los profesionales sanitarios fisioterapeutas. «Estas actuaciones, además de constituir un posible delito de intrusismo ponen en grave peligro la salud de los usuarios ya que los están prestando personal no capacitado ni técnica ni legalmente para ello», explica el asesor jurídico del Colegio, Santiago Sevilla.

El Icofcv ha realizado esta petición en un escrito que ha enviado al consistorio, en el que ha aportado diversas pruebas gráficas, así como la declaración de un usuario que fue tratado el pasado 3 de septiembre al que, tras decir que sufría dolores cervicales, mareos y tensión en la espalda, le realizaron un masaje terapéutico y descontracturante. Las pruebas demuestran no sólo que la empresa publicitaba «masajes terapéuticos» sino que además «los prestaba, a pesar de no contar con fisioterapeutas, poniendo en riesgo la salud de los turistas».