Quien piense que en una taza de te no hay rastro de cafeína incurre en un error muy común, ya que este psicoactivo alcaloide está tan presente en el café como en el te. Así lo indicó a Levante-EMV la profesora del departamento de Farmacia de la Universidad CEU-Cardenal Herrera de Valencia Encarna Castillo que junto con su compañera Isabel Martínez Solís, investigadora del Jardín Botánico, han coordinado la segunda edición de Manual de Fitoterapia, en la que han participado profesores y catedráticos de trece facultades de Farmacia de España, así como expertos de institutos de investigación y laboratorios, médicos y farmaceúticos conocedores del poder curativo de las plantas.

La obra, que ha publicado la editorial científica Elsevier, repasa la actividad farmacológica de las plantas medicinales, informa de las dosis adecuadas para que sean eficaces, así como de las contraindicaciones y los efectos adversos de sus principios activos.

A lo largo de doce capítulos el manual desvela el gran potencial de la fitoterapia para tratar patologías del sistema digestivo, respiratorio, circulatorio y sistema nervioso, entre otras, y enfermedades sociales más modernas como los cuadros de depresión, la ansiedad y las alteraciones del sueño.

Encarna Castillo apuntó que el manual incluye también nuevas indicaciones del uso de algunas plantas, así como nuevas nomenclaturas.

A nivel práctico, la docente indicó que las plantas recomendadas para tratar la hipertensión por ansiedad son el olivo (sus hojas) y el ajo, sobre todo si está machacado. También se puede recurrir al espino albar porque ayuda a controlar las palpitaciones pero hay que tener mucha precaución con su uso si existe un problema cardiovascular de base en el usuario, como las arritmias.El ajo también es bueno para combatir el colesterol, pero no ingiriéndolo entero porque entonces su acción es mínima, sino triturado, porque las enzimas que contiene forman principios activos que actúan sobre esta grasa mala del organismo que se deposita en las arterias y puede llegar a bloquearlas. Para contrarrestar la acción lesiva del LDL (el colesterol malo) también se puede utilizar la alcachofera „su extracto seco en cápsulas„, así como las semillas de lecitina de soja.

La naturaleza también ofrece remedios para tratar la migraña como el tanaceto partenium que en infusión mitiga estos persistentes dolores de cabeza. También se puede recurrir a un extracto seco que conserva todos los principios activos, según precisó la profesora y doctora en Ciencias Químicas Encarna Castillo.

Es de conocimiento popular que el Hipérico o Hierba de San Juan es eficaz para combatir estados depresivos. Sin embargo, la especialista apuntó que hay que ser muy cuidadoso y precavido con el uso que se haga de esta planta porque interacciona con los medicamentos que se metabolizan en el hígado, que son la mayoría. Esto es lo que ha retraído el uso cotidiano de esta planta medicinal.

Otro de los males más extendidos de hoy día como es el insomnio se puede erradicar a través de infusiones de valeriana y pasiflora que contienen componentes ansiolíticos y sedantes. En cuanto a los antiinflamatorios que se encuentran en la Naturaleza, la experta resaltó el sauce, y especialmente su corteza, que es de donde procede la salicina que posteriormente permitió sintetizar el ácido acetilsalicílico que es el principio de la aspirina. También se puede echar mano del harpagofito o Garra el Diablo, cuyo efecto es muy parecido al de los antiinflamatorios no esteroideos aunque hay que tener cuidado para evitar daño gástrico. Otra planta que reduce el dolor en las articulaciones es la Uña de gato.