El Pleno del Ayuntamiento de Valencia ha aprobado con los votos a favor del tripartito el presupuesto inicial y consolidado del Ayuntamiento de Valencia para 2016. El grupo municipal se ha abstenido y el PP ha votado en contra.

Los presupuestos municipales de 2016 suben hasta 753 millones de euros (836 incluyendo los organismos autónomos, entre ellos y por primera vez, el palacio de Congresos). Aumentan pues en 15,5 millones más que este año. La mayor parte (535 millones de euros) irá destinada a bienestar social y servicios a la ciudadanía.

El alcalde Joan Ribó ha defendido que las cuentas apobadas "reflejan las prioridades del gobierno municipal claramente" y ha enumerado las inversiones que se realizan de cara a 2016. El primer edil ha asegurado que son los presupuestos "de todo el gobierno, con sus matices, porque estamos orgullosos de nuestras diferencias".

El portavoz popular, Alfonso Novo, ha replicado al alcalde que no es verdad "que van a batir un récord de inversión, porque los presupuestos no son sociales, no atienden necesidades de barrios ni generan empleo. Votamos que no", ha sentenciado. Novo ha asegurado que son unos presupuestos en los que los tres partidos de gobierno "se han arreglado el corralito". "Son partidistas", ha espetado.

El portavoz de Ciudadanos, Fernando Giner, ha insistido en la idea que los presupuestos suponen una subida del IBI y otros impuestos. El alcalde, sin embargo, explicó que el IBI total aumenta, "pero solo de los grandes negocios", algo que asegura "no afecta al pequeño comercio".

Giner, ha defendido su abstención al considerar que no se concreta a qué políticas sociales se destinan los 44 millones de ingresos de más y reprochar la subida de los impuestos que lleva a los valencianos a pagar 400 euros por persona de impuestos directos cuando en 2011 pagaban 361. El líder de C's ha reprochado que la subida de impuestos "no se refleja en mejoras de los servicios sociales".