Las asociaciones de vecinos de Valencia han denunciado la «relajación» de las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS) y reclaman una revisión de las mismas para volver al menos al punto de partida. El próximo día 1 de diciembre, en consecuencia, tendrán un encuentro con la concejala responsable de Contaminación Acústica, Pilar Soriano, en la que le pedirán una posición clara al respecto y, en caso de no obtener respuesta, le harán entrega de una manifiesto con sus reivindicaciones.

En Valencia existen en la actualidad cuatro zonas ZAS: San José-Xúquer, El Carmen, Woody y Juan Llorens. Se trata de zonas de ocio nocturno es las que a petición de los vecinos y por imposición judicial, se han implantado una serie de medidas más estrictas que en el resto de la ciudad. Los horarios de cierre son más limitados, no se autorizan nuevas licencias de locales de ocio, se restringe el tráfico en sus calles y se vigila de cerca la venta ilegal de comida y bebida.

El problema, según los vecinos de estas zonas, es que esas medidas no se han implantado con todo su rigor y pasado un tiempo se han ido relajando hasta prácticamente desaparecer.

Según la presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, María José Broseta, que está coordinando estas quejas, a día de hoy las medidas son imperceptibles, en el Carmen no se hacen las restricciones de tráfico previstas; en San José, que fue la primera y la más restrictiva, se ha vuelto a la situación inicial y en general, sigue habiendo molestias a los vecinos, que es precisamente lo que se quería evitar con estas medidas.

Es más, Broseta asegura que hay otras zonas como Russafa o la Plaza del Cedro que llevan el mismo camino pese a las restricciones que se iban a imponer, por ejemplo, para no abrir locales a menos de 60 metros uno de otro.

Escuchar y plantear

Los vecinos, por tanto, piden que se vuelvan a implantar estas medidas en toda su extensión y que se despejen las dudas que ha sembrado el nuevo equipo de gobierno con sus declaraciones. También exigen que se clarifiquen los criterios por los que se rigen estas zonas, independientemente de que luego cada una pueda tener sus peculiaridades.

«Nosotros „explica Broseta„ queremos que la concejala nos explique sus planes, sus previsiones y sus ideas para las zonas acústicamente saturadas, y si no nos convence o no es lo que esperamos, entonces le entregaremos un documento con nuestras propuestas».

La reunión se ha previsto para el próximo 1 de diciembre y, en principio, estarán presentes representantes de las cuatro ZAS y de la Federación de Asociaciones de Vecinos de Valencia.