«Eduquemos con ejemplo, cumplamos las promesas». A ritmo de batucada unas 200 personas, entre pequeños y mayores, se reunieron ayer por la mañana en el solar cercano al centro Max Aub de Valencia para reivindicar una vez más que empiecen las obras de ampliación del colegio, las cuales esperan desde hace 15 años.
El AMPA quiso visibilizar sus reclamaciones pero de una forma festiva que incluyese a los niños también. De ahí surgió la iniciativa «Flors a la tanca». Varios globos, 500 flores y muchos carteles, hechos por alumnos y profesores, decoraron la valla del solar para indicar que, aunque actualmente funciona como aparcamiento y «pipican», está calificado como terreno educativo.
Objetivos de la concentración
Quieren conseguir que empiecen las obras lo antes posible para acabar con las «deplorables» condiciones que el centro soporta desde hace más de una década. Las esperanzas recaen ahora en el nuevo gobierno municipal. «La gente que hoy está en el poder era la que estaba hace muy poco tiempo con nosotros en la lucha para ampliar el centro», asegura la presidenta del AMPA.
Los alumnos actualmente acuden a un colegio que no tiene biblioteca, gimnasio, salón de actos, laboratorio de idiomas o un comedor con capacidad suficiente para los 350 niños que son. Compete a la Conselleria de Educación llevar a cabo la ampliación. «Hay una comunicación más fluida, veremos a ver si también hay actos», indican los padres, que proponen negociar una construcción por fases que permita agilizar el proceso.
