El área de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia ha decidido paralizar cautelarmente las obras en el edificio de la antigua horchatería «El Siglo» en la Plaza de Santa Catalina de Valencia, porque carecían del permiso de la Conselleria de Cultura, obligatorio al tratarse de un entorno BIC (Bien de Interés Cultural), según confirman fuentes municipales a Levante-EMV.
Como ya adelantó Levante-EMV el pasado 29 de diciembre, los actuales propietarios del edificio han comenzado a realizar obras para habilitar un apartahotel a los pies de la torre de Santa Catalina y junto a la Plaza de la Reina, uno de los centros neurálgicos del turismo de la ciudad.
Las obras, según confirman desde el Ayuntamiento de Valencia, se han iniciado bajo la fórmula de una «declaración responsable tipo 2» (una comunicación de inicio de obras en la que el promotor se compromete a cumplir el proyecto presentado para una reforma que no requiera instalación de andamios). Aunque la ubicación del edificio, en pleno barrio de la Seu y pegado a la iglesia de Santa Catalina (siglo XIII), en un entorno BIC ha llamado la atención de defensores del patrimonio, que alertaron a los responsables municipales de Urbanismo.
Desde el área que dirige el concejal Vicent Sarrià confirmaron que «la inspección de licencias ha visitado la obra porque teníamos la denuncia de que las obras que se estaban ejecutando tenían más envergadura de las que se habían presentado en la declaración responsable».
Retirada de azulejos antiguos
Defensores del patrimonio explican a Levante-EMV que se interesaron por unos azulejos antiguos que se estaban retirando del edificio y que un encargado de la obra les confirmó que podrían recogerlos porque habían sido desechados. Este periódico intentó recabar la versión de los responsables de la actuación en el edificio, sin éxito.
A estos antecedentes se une el hecho de las particularidades patrimoniales del entorno en el que se encuentra el edificio de la antigua «Horchatería El Siglo», que cuenta con nivel de protección 3 (se debe proteger la fachada pero el interior se puede reformar y eliminar elementos impropios). También está incluido en un entorno BIC (por lo que se requiere autorización de la Conselleria de Cultura del que carecía la reforma de «El Siglo») y en el Plan especial de protección y reforma interior (Pepri) del Mercat del que, precisamente, se va a aprobar en el pleno municipal de este mes el «Plan Especial de Protección en el ámbito del Conjunto Histórico del Area Central».
Debido a las particularidades del entorno, el concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, hizo ayer un llamamiento a la «sensibilidad patrimonial» en cualquier intervención que se realice en el centro histórico y, en concreto, a los responsables de la reforma del edificio de la antigua «Horchatería El Siglo».
El histórico establecimiento echó el cierre el 31 de diciembre de 2014 tras 178 años sirviendo una de las mejores horchatas y buñuelos con chocolate de toda la ciudad. El motivo del cierre fue el elevado precio de alquiler que el dueño del edificio reclamaba a la familia que regentó el negocio durante cuatro generaciones, tras el final de la moratoria de los alquileres de renta antigua del «decreto Boyer» de 1985.
La «Horchatería El Siglo», que presumía de ser la más antigua del mundo, se fundó en 1836 y su terraza en la Plaza de Santa Catalina, pegada a la de la Plaza de la Reina, solía estar abarrotada de clientes y turistas durante todo el año para degustar una horchata o un chocolate con buñuelos de calidad, hechos artesanalmente en el obrador del establecimiento.
