El concejal de Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, propiciará un cambio del planeamiento del Cabanyal para dar cabida al primer hotel proyectado en el barrio, concretamente en la emblemática calle de la Reina. En este eje se conservan varios edificios de estilo modernista, si bien el edificio que, tal como adelantó este diario, ha comprado un inversor extranjero para promover el hotel es un inmueble de estética racionalista y cinco alturas. Este edificio se encuentra fuera de ordenación ya que las normas transitorias que el ayuntamiento de Valencia está tramitando para dotar de una normativa urbanística al barrio tras la derogación del Plan de Reforma Interior (Pepri) y la prolongación de Blasco Ibáñez solo permiten en esta zona tres alturas. El inmueble tiene cinco, si bien la delegación de Urbanismo considera que la puesta en marcha de un hotel en el Cabanyal sería un incentivo para el barrio por lo que tramitará una modificación de la normativa para propiciar su construcción.
Las normas urbanísticas transitorias aprobadas por el gobierno tripartito de Ribó para el Cabanyal están en fase de respuesta de las alegaciones. El área de Urbanismo confía en poder aprobarlas en breve para dar impulso definitivo al proceso de rehabilitación del barrio. El ayuntamiento es dueño de casi 600 viviendas en el Cabanyal, para las que habría casi medio centenar de potenciales compradores. Está por ver qué destino quiere dar el ayuntamiento a estas casas así como a los cientos de solares que proliferan y degradan el barrio.
Los vecinos del Cabanyal aseguran que el ritmo de regeneración del barrio no está siendo el esperado puesto que las ayudas no terminan de llegar.
En concreto, las que se han solicitado a Bruselas, dentro de los fondos Feder, en el caso de aprobarse definitivamtente no llegarían hasta después del verano. Las subvenciones del Ministerio de Fomento para el barrio, declarado Área de Rehabilitación Urgente (ARRU), tambien se retrasan. El convenio entre las tres administraciones (estatal, autonómica y municipal) está firmado pero el reglamento que regula la tramitación de las ayudas no está redactado „y todo indica que la Conselleria de Vivienda no lo tendrá acabo hasta febrero„ y los interesados en rehabilitar sus inmuebles no pueden acogerse aún a estas ayudas.
Los vecinos del Cabanyal aseguran que las mejoras urbanísticas incidirán en la mejora social del barrio, aunque también demandan actuaciones más decididas en materia de integración social.
En el Cabanyal hay en la actualidad 15 colectivos ciudadanos implicados, desde distintas vertientes, en la mejora del barrio. Desde Salvem el Cabanyal, que tras la derogación del Pepri está reconduciendo sus objetivos, hasta La Colectiva „una entidad que está haciendo un importante trabajo en la formación de colectivos con riesgo de exclusión como gitanos y rumanos„, pasando por iniciativas más relacionadas con la cultura y las tradiciones como Cuina Oberta o el movimiento ocupa, que está plenamente instalado en el barrio y que empieza a generar quejas de los vecinos por el ruido y las fiestas nocturnas. En el Cabanyal confluyen numerosos colectivos con intereses en muchas veces distintos que piden respuesta al tripartito.
La degradación urbanística propicia guetos en el barrio
La situación urbanística del Cabanyal está controlada porque ya no existe la amenaza de los derribos, pero el ayuntamiento no termina de atajar el problema de la fractura social. El ex dirigente de Salvem el Cabanyal, Faustino Villora, destaca que hay zonas del barrio, como la calle San Pedro, donde el 70% de la población son gitanos-rumanos. Son «guetos» dice Villora ante los que urge actuar.
