El equipo de Gobierno municipal facilitará todos los medios para el desarrollo de los actos del patrón de la ciudad, San Vicente Mártir, pero no participará institucionalmente en ninguno de ellos debido a su estricto carácter religioso. El concejal de Fiestas, Pere Fuset, acudirá a la procesión y al bautismo de la iglesia de San Esteban en calidad de espectador, dijeron fuentes oficiales. Y los concejales socialistas Joan Ribó y Maite Girau lo harán a título particular.
Para el próximo viernes, día de San Vicente Mártir, el Arzobispado de Valencia ha organizado una serie de actos religiosos que se vienen repitiendo todos los años desde hace décadas. La catedral de Valencia, donde se venera el brazo del santo desde hace 46 años, celebrará a las 10.30 horas la misa en honor del patrón y la posterior procesión por la plaza de la Reina, calle del Mar, Avellanas, plaza del Arzobispado y plaza de la Almoina.
Posteriormente, a las 13.00 horas, el cardenal Cañizares bautizará al niño Diego Vicente Blanco Buenos en la parroquia de San Esteban, protomártir de Valencia, un acto organizado por la Asociación de la Pila Bautismal de San Vicente Ferrer.
Y por la tarde, a las 20.00 horas, se celebrará la tradicional misa en rito hispano-mozárabe en la parroquia de Cristo Rey de Valencia (la Roqueta), donde por la mañana, a las 11.00 horas, tendrá lugar la tradicional bendición y reparto de los panes de San Vicente y la misa mayor, con ofrendas de flores a cargo de las comisiones falleras.
Cambio de costumbre
Todos estos actos, organizados por la Iglesia, siempre, o al menos en la última etapa, han estado presididos por el alcalde o la alcaldesa de la ciudad, la última Rita Barberá. Pero este año, con el nuevo gobierno municipal (Compromís, Partido Socialista y València en Comú), no habrá una representación institucional del Ayuntamiento de Valencia. Ya en su día, el equipo que lidera Joan Ribó anunció que no asistiría a los actos religiosos, dejando libertad, eso sí, para que sus miembros lo hagan a título individual. La aconfesionalidad del Estado es el motivo, explicaron.
El Ayuntamiento, según fuentes oficiales, apoyará todos los actos con sus recursos públicos. En la Iglesia de San Vicente de la Roqueta (junto a la Plaza de España) pondrá la ornamentación y el grupo de Tabals y Donçaines. En la Pila Bautismal de San Vicente Ferrer aportará la indumentaria histórica y la banda de música. Y en la catedral pondrán la Banda Municipal , la policía de gala, la organización del tráfico, el protocolo etc., explicaron fuentes municipales.
También el concejal de Fiestas, Pere Fuset, acudirá a la salida de la procesión y a los actos en la Pila Bautismal, pero lo hará como mero espectador, precisaron.
Quienes sí han anunciado que estarán en los actos religiosos más destacados son los concejales socialistas Joan Calabuig, primer teniente de alcalde, y Maite Girau, responsable de Deportes, aunque lo harán a título particular.
Según explicó Calabuig, su grupo comparte plenamente la decisión del equipo de gobierno de separar la religión de la vida institucional y, en consecuencia, la decisión de no estar presentes en unos actos que están organizados por el Arzobispado.
Entiende, así mismo, que Fuset asista como mero espectador si siente atracción por lo que también es una manifestación cultural de primer orden.
Calabuig explicó, por último, que en la catedral ocuparán el puesto que les asigne el Arzobispado, que es el organizador y el que los ha invitado.
