La Concejalía de Movilidad Sostenible está ultimando el rediseño del tráfico en el entorno de la Lonja y la plaza del Mercat que en febrero se convertirán en espacio libre de coches. La concejalía que dirige Giuseppe Grezzi ha solicitado a la de Parques y Jardines la cesión de maceteros redondos para delimitar el nuevo espacio peatonal en la avenida María Cristina, la plaza del Mercat y Bolseria. De momento, la concejalía ha recibido ya 40 maceteros que Parques y Jardines había retirado, porque habían sufrido vandalismo o no se utilizaban, y que se repintarán para darles nuevo uso. La concejalía de Movilidad también ha solicitado la cesión de bancos y otro mobiliario urbano para instalar en la zona. La idea es que la peatonalización «blanda» del entorno tenga un coste mínimo para el ayuntamiento y además permita comprobar los pros y contras de la medida e introducir cambios.

La avenida María Cristina pasará a tener un solo carril y el espacio ganado al coche se cederá al peatón. Dado que la concejalía no tiene de momento presupuesto para ejecutar una remodelación urbanística profunda, con nuevas aceras y pavimentación, se recurrirá a bajar las terrazas de las cafeterías a la calzada.

Bolardos o cámaras

La semana próxima se empezara a instalar la señalización vertical y horizontal y los carteles para informar a los conductores de la nueva ordenación del tráfico. Como se prevé que se generen atascos los primeros días, en la entrada de María Cristina desde San Vicente y la plaza del Ayuntamiento se creará una zona para facilitar el giro de los vehículos y se habilitará un recorrido de evacuación.

Como se ha publicado la calle Bolsería se cerrará al tráfico, cortando así en gran parte el tráfico oportunista que utiliza el centro histórico para llegar de un barrio a otro. Con el cierre de Bolsería y con las restricciones al tráfico en María Cristina, por donde solo podrá circular transporte público, taxis, residentes y clientes del mercado central que vayan al aparcamientos subterráneo, se libera de tráfico la fachada delantera de la Lonja, declarada Patrimonio de la Humanidad, un reconocimiento que, según apuntó el alcalde, Joan Ribó, peligraba por la degradación urbanística y el tráfico del entorno. También se cerrará al tráfico la parte trasera de la Lonja. El ayuntamiento ya está trabajando en la peatonalización de la calle Quart y Caballeros. Para ello se están estudiando distintas alternativas desde los bolardos a las cámaras de vigilancia que grabarán las matrículas y enviarán las multas a quienes incumplan con las restricciones del tráfico.

El concejal Giuseppe Grezzi reiteró que el objetivo del nuevo gobierno es el cierre progresivo al tráfico del centro histórico, sin embargo, admitió que es un proyecto con mucha complejidad dado el gran tamaño del centro histórico de Valencia y la cantidad de derechos adquiridos que se han generado, por ejemplo, para el acceso a los aparcamientos de residentes y para los vehículos de carga y descarga.