Sobre el duro asfalto de la plaza del Ayuntamiento ayer crecieron plantas, flores y verduras. En una nueva edición de «La plaça per al poble», la iniciativa municipal que el último domingo al mes peatonaliza la plaza del Ayuntamiento, el céntrico enclave se llenó de cerca de ochenta puestos de agricultores de los alrededores de la ciudad en un mercadillo ecológico organizado por las concejalías de Agricultura y Huerta y Devesa-Albufera que llevó por nombre «De l´horta a la plaça».

El mercado se inauguró a las 10 horas y permaneció abierto hasta las 17 horas y fue todo un éxito, a juzgar por las cientos de personas que abarrotaron ayer la plaza durante el día. Se acercó por la plaza incluso el alcalde de la ciudad, Joan Ribó, que acudió al mercado acompañado por su pareja, para hacer algunas compras.

El mercado ecológico se entronca en las iniciativas llevadas a cabo por la Concejalía de Agricultura, que ha puesto en marcha todo un programa de medidas que pretenden poner en valor la huerta situada en el término municipal de la ciudad, como explicó ayer la concejala del ramo, Consol Castillo.

Además del mercado de la agricultura y la huerta, que cuenta con la colaboración del Centro de Estudios Rurales y de Agricultura Internacional (Cerai), del Consell Agrari Municipal, la EMT y la Generalitat Valenciana, se instalaron en la plaza talleres infantiles y se presentaron proyectos y actividades musicales. El mercado finalizó al filo de las 17 horas con una «batukada», y además de ofrecer productos ecológicos de la huerta se organizaron charlas, demostraciones culinarias, y la presentación de variedades y cultivos presentes en la huerta periurbana de Valencia. Según Castillo, «se trata de una primera acción que complementa las que ya estamos llevando a cabo para cambiar la alimentación, por ejemplo, en los centros escolares y residencias de mayores».

Además, como en otras ediciones, se desviaron cerca de 20 líneas de autobús de la Empresa Municipal de Transporte, que instaló una carpa en la que el cocinero Salvador Gascón realizó una exhibición relacionada con el arroz con denominación de origen. La circulación por las calles de La Paz y San Vicente quedó restringida y se habilitaron vías alternativas para acceder a Ciutat Vella.

En cuanto a la oferta, hubo producto primario fresco o elaborado, artesanía y herramientas agrícolas e incluso libros de temática agrícola. Según el tipo de producto, compartieron la plaza la producción ecológica, agroecológica, las variedades locales más tradicionales y las más innovadoras, y estuvo presente «la tira de contar», «una institución foral que es una seña de identidad que queremos que se ponga en valor», según explicó Castillo.