«Sectaria» y «arbitraria». Con estos dos términos calificó ayer el grupo municipal popular la eliminación del distrito único por parte del gobierno del tripartito. Así se expresaba Cristobal Grau un día después de que el Consejo Escolar aprobase la vuelta a la situación de 2012. «Como ya veníamos anunciando, el tripartito ha consumado la eliminación del distrito único y con él, deja a las familias valencianas sin derecho a elegir libremente el centro educativo que prefieren para sus hijos.», apuntaba Grau.

El edil popular lamentaba también una decisión que en su opinión afecta de manera muy especial y directa a las familias de la ciudad de Valencia, y aseguraba «no entender por qué se deja sin efecto una medida que el pasado curso permitió que más del 93% de las familias valencianas pudiese matricular a sus hijos en el centro escolar que había elegido como primera opción». Grau tachaba la actuación como «sectaria y arbitraria, al no permitir que se debatiese la eliminación del distrito único entre los profesionales y representantes del sector educativo y no dejando lugar a la confrontación de ideas y argumentos a los defensores del distrito único». El que fue edil de educación en la anterior legislatura municipal criticaba la «forma precipitada» con que se había tomado la decisión, «sin ninguna justificación técnica y sin ningún intento de consenso con el resto de grupos municipales» y anunciaba que su partido presentará una iniciativa al próximo pleno en defensa de los derechos y libertades de las familias, «porque consideramos fundamental y muy positivo para la educación de nuestros hijos, poder elegir el centro escolar dónde queremos que se formen».

Grau insistía en que el Partido Popular siempre «estará en la defensa de una Educación en libertad y en contra del pensamiento único». «Nosotros siempre hemos defendido y defenderemos tanto la enseñanza pública como la concertada, en pie de igualdad, porque sólo así podremos garantizar que las familias puedan elegir en completa libertad el modelo educativo que prefieren para sus hijos. Son las familias, y no ningún gobierno, las que deben tener el protagonismo a la hora de adoptar una decisión tan importante», esgrimía.