El concejal de Desarrollo Urbano y Vivienda, Vicent Sarrià, junto con el alcalde pedáneo, Alejandro Ramón, y varios miembros de la Associació de Veïns, entre ellos su presidenta Empar Puchades, realizaron el pasado miércoles una exhaustiva visita a Castellar-l'Oliveral para programar proyectos de renovación de aceras, asfaltado y apertura de calles, que mejoren la seguridad vial y faciliten la movilidad de las personas.

Una de las principales demandas que expusieron los representantes de la Associació de Veïns fue la necesidad de contar con una nueva plaza para actividades complementarias en la pedanía, ya que actualmente la localidad cuenta con pocos espacios donde se puedan realizar actividades de socialización.

La presidenta de la entidad vecinal, Empar Puchades, explicó a este periódico que Castellar cuenta con un solar frente al nuevo centro cívico que, en principio, está catalogado para zona verde, pero consideran que sería «un buen punto de partida» discutir los usos de este espacio y diseñar entre todos qué es lo que se quiere.

«Es evidente que hay que respetar las zonas verdes porque son muy importantes, pero tal vez se puede realizar un diseño que cubra otras necesidades, como incorporar una plaza que sería un complemento perfecto», explicó la p0rtavoz vecinal. De hecho, la Falla de Castellar ha pedido al alcalde pedáneo una ubicación para poder instalar una carpa para realizar sus actividades, tal y como disponen sus vecinos de l'Oliveral.

Durante la visita, el concejal Vicent Sarrià se comprometió a la próxima apertura de la calle José Siurana en la confluencia con la calle de la Figuereta y se gestionará la ocupación anticipada con la propiedad para poder abrir y urbanizar la calle de San Salvador, donde como en el caso anterior hay un tapón urbanístico. «Desgraciadamente contamos con varios 'cul de sac' en la población y es importante que se vayan solucionando poco a poco», explicó Empar Puchades.

Otras de las reivindicaciones históricas planteadas por los vecinos es la urbanización de la calle de Aurora, donde todavía existen propiedades privadas, y se está gestionando una ocupación anticipada con sus propietarios para poderse urbanizar. En este sentido, al parecer los trámites están muy avanzados y cada vez está más cerca terminar la urbanizción de esta importante vía para la población.

Sarrià también planificó con el alcalde Alejandro Ramón y los representantes vecinales otras actuaciones, como la mejora de los accesos a la piscina pública, de la que también se planteó que en el futuro se pueda cubrir.

Entre los pequeños terrenos municipales con los que cuenta Castellar y l'Oliveral, se estudió que dotaciones se podrían incorporar en el futuro para uso público, como la posibilidad de construir una escoleta infantil.