En contestación a su artículo publicado en Levante-EMV el pasado día 28 de Febrero, y sin dudar en absoluto de sus amplios conocimientos sobre la Dehesa del Saler, cuya AVV cuenta en la actualidad con 1.080 socios, le comunicamos que según nuestras fuentes, la propiedad del Sidi Saler, no es de los bancos, el BBVA y Banco de València en concreto, al menos en su totalidad, pese a los registros que Vd. haya consultado, puesto que estos tienen el leasing con opción de compra que le concedieron a Manfred Stier, el anterior propietario, en febrero de 2007, con amortizaciones hasta el 2022. Dicha operación permitió al empresario obtener una liquidez, como se dice en Levante-EMV, que según fuentes sindicales estaría cifrada en 55 millones de euros. Tras la firma del acuerdo el grupo Sidi desvió a la Fundación Inva, ligada a la compañía, la cantidad de 42 millones de euros.

Aclarando conceptos la titularidad es estatal aunque la deuda sea de los bancos, y como el DPMT es inembargable, a menos que haya una concesión especial por parte de este, no creemos que los bancos puedan cobrar su deuda.

Dicho todo esto, nos mantenemos en nuestra propuesta de darle una viabilidad como residencia para mayores, de la cual tan necesitadas están las pedanías del Sur, con los consecuentes puestos de trabajo que esta generaría y que tanto bien haría a nuestra comunidad.

Respecto a la Venta de los Toros, que según afirma está inscrita a nombre del Hospital Provincial de València, cosa que no dudamos, pero teniendo en cuenta que este es propiedad de la Diputación, entendemos y compartimos la opinión del diputado competente en la restauración i conversión en una edificación que tenga alguna utilidad pública. Otra cuestión es el hecho de encontrarse, como Vd. indica, en una Zona de Protección Integral integrada en el PRUG. Un PRUG por cierto, totalmente caduco, que se encuentra a la espera de la aprobación del nuevo, de gran complejidad dado que se han realizado numerosas alegaciones al mismo. En fin, las autoridades competentes tendrán que ponerse de acuerdo para decidir al respecto.

Ya para acabar, entendemos su preocupación sobre la Dehesa que compartimos, a partir de nuestro respeto total por el medio ambiente y su hábitat natural. La felicitamos una vez más por todas las mejoras que ha conseguido para el barrio de La Amistad „urbanización integral incluida„ del que es usted presidenta y que, por cierto, y debido al lógico crecimiento de la ciudad, se encuentra encima de nuestra valiosa y amenazada huerta. Ustedes al menos pueden decir que sus esfuerzos y sus impuestos revierten en su barrio, cosa que no sentimos los vecinos de la Dehesa.