La aprobación del proyecto de reparcelación forzosa de la fase 1A de la urbanización del Parque Central, que acaba de salir a exposición pública por un plazo de un mes, supone un paso decisivo para que la Sociedad Valencia Parque Central, donde están representados el Ministerio de Fomento, la Generalitat y el Ayuntamiento de Valencia, empiece a obtener ingresos por la venta del suelo edificable.
Esta primera fase, que comprende el jardín de Russafa-Malilla, cuenta con varias parcelas edificables repartidas en las esquinas y el perímetro del parque, principalmente en los solares ubicados frente a la estación del AVE de Joaquín Sorolla y en el entorno de las confluencia de Ausias March con el puente de Giorgeta. En total en esta fase hay una edificabilidad prevista de 135.000 metros cuadrados, lo que aplicando un cálculo optimista de valor del suelo de mil euros supondría un volumen de negocio de aproximadamente 135 millones de euros. La propiedad de los terrenos se reparte, más o menos, al 50% entre propietarios privados „entre los que se encuentran desde familias hasta promotoras„ y la administración pública.
El ayuntamiento confía en que a partir de la aprobación de la reparcelación y en el plazo aproximado de un año puedan empezar ya a comercializarse las pastillas de suelo edificables del parque central, lo que supondrá un balón de oxígeno para la sociedad Parque Central y para las administraciones que la integran (Ministerio de Fomento, Generalitat y Ayuntamiento de Valencia) que hace un año suscribieron un convenio para realizar aportaciones a la sociedad para dotarla de liquidez.
El ayuntamiento se comprometió a aportar 40 millones de euros en cinco anualidades „la primera de las cuales, de siete millones, se ha realizado este año„ y ahora confía en poder ir recuperando estos ingresos. En 2003 se calculó que la operación Parque Central, que contempla el soterramiento de la playa de vías, generaría unas plusvalías por la venta del suelo liberado de 310 millones de euros.
De momento, esas plusvalías no han sido posibles porque faltan la mayoría de infraestructuras ferroviarias anunciadas. Mientras no se termine el soterramiento de las vías y se construya la nueva estación no se podrán liberar los terrenos de las otras dos fases del Parque Central, la que afecta al futuro bulevar García Lorca y la que afecta a los terrenos que hoy ocupa la estación provisional del AVE.
La Sociedad Parque Central tiene pendiente de pago un crédito de 115 millones de euros solicitado para hacer frente a gastos, especialmente de obra ferroviaria, cuyos intereses hay que empezar a pagar a partir del 31 marzo.
El concejal de Desarrollo Urbano y Vivienda y consejero de la Sociedad Valencia Parque Central, Vicent Sarrià, considera que la aprobación de esta reparcelación, soluciona un problema que dejó sin resolver el anterior gobierno que adjudicó las obras de la primera fase del jardín sin ser aún propietario del suelo ni estar aprobada la reparcelación, lo que ha obligado a ir firmando acuerdos de cesión anticipada del suelo con cada uno de los propietarios, lo que ha ralentizado las obras del jardín.
