La Mare de Déu y San Pascual Bailón tendrán nuevos casilicios. El puente del Mar se encuentra actualmente sometido a trabajos de restauración de los casilicios que adornan la pasarela como parte de las mejoras ofrecidos dentro de las obras de conservación de los puentes de Serranos y Trinidad.

Estos trabajos se adjudicaron en 2007 a Estudis Mètodes de Restauració, SL, por 2.357.951,98 euros. Empezaron en 2007 y terminaron. El pasado verano, la misma empresa presentó como mejora (se suelen ofrecer por parte de las empresas que concursan a procesos) sin suponer ningún coste adicional la restauración de los casilicios de los puentes del Mar y del Real.

Para que pudiera iniciarse esta obra de restauración, era necesario el visto bueno de la Conselleria de Cultura, que lo ofrece el 19 de octubre pasado, según fuentes de la Concejalía de Patrimonio Cultural del Ayuntamiento de Valencia. Apenas una semana después aprobó el proyecto el arquitecto técnico de la Oficina Técnica de Restauración de Monumentos. Se prevé que las obras duren unos dos o tres meses, según datos de la concejalía.

Este puente es uno de los más antiguos de la ciudad. Su construcción se acordó en 1591, tras ser destruido el anterior por una riada. Fue durante siglos el camino natural que unía la ciudad con su puerto. En 1933 se convierte en peatonal al construirse las escalinatas de acceso, obra de Javier Goerlich Lleó. Tiene 10 ojos o arcos de 15,5 metros de luz cada uno, 160 metros de longitud y 8,35 metros de ancho. Tiene rampa, hacia aguas abajo, para evitar que subiera la corriente, por el lado de la ciudad. Los casilicios son triangulares, sobre gran pedestal con lápida, con columnas y cubierta de teja coronada por pináculo y bolas, que albergan las imágenes de la Virgen y San Pascual.

Originariamente, en uno de los casilicios había una cruz y sobre el tejado unas imágenes de sant Vicent Ferrer, san Vicente Mártir y san Juan Bautista. En 1709, según las crónicas, un rayo destrozó el casilicio por lo que se cambió la cruz por una imagen de la Mare de Déu, que data de 1721. Hacia 1677 se colocó un segundo casilicio con una imagen de San Pascual Bailón frente al primero. La riada del 24 de octubre de 1776 deterioró ambos casilicios, por lo que la Fabrica Nova del Riu ordenó al escultor Francisco Sanchiz que restaurase la imagen de San Pascual y construyera otra nueva imagen de la Virgen de los Desamparados. Las imágenes fueron repuestas nuevamente en 1782.