El ayuntamiento ha encargado un estudio a la Universidad Politècnica de València (UPV) para el futuro cobro de las tasas por ocupación de la vía pública según la zona de la ciudad donde se solicite el permiso. La intención es estipular una tarifa dependiendo de si la zona es más o menos comercial, «ya que no es lo mismo una terraza en la calle Colón que en el barrio de Orriols», aseguró ayer el concejal de Hacienda, Ramón Vilar.

La aplicación de estas nuevas tasas afectarían no sólo a las terrazas de los negocios hosteleros, sino también a vados o las paradas del bus turístic, que hay que recordar que hasta ahora no pagaba canon al ayuntamiento por el servicio que presta, una situación que ha denunciado el tripartito tras criticar la gestión del PP. La medida también pretende equiparar las tasas de Valencia a lo que se paga en otras grandes urbes españolas.

Fuentes de la Concejalía de Comercio aseguran que este estudio está todavía «en fase inicial» y que no es segura la futura aplicación de tasas según zonas, aunque la intención es que para junio el consistorio ya tenga las conclusiones para la mesa para, en septiembre, aprobar la nueva normativa. Su aplicación, no obstante, se retrasaría hasta el 1 de enero de 2017, ya que se trata de una medida «que necesita ser estudiada con profundidad antes de su aplicación», explicaron.