El concejal del Grupo Popular Félix Crespo asegura que las Concejalías de Protección Ciudadana y Cultura Festiva, encabezadas por Sandra Gómez y Pere Fuset, no informaron durante su balance de fallas de las denuncias a casales falleros, locales de ocio y puestos de venta ambulante, a pesar de que se impusieron 27, 269 y 253 denuncias, respectivamente.
Crespo asegura que los balances de los resultados de las pasadas fiestas falleras «fueron sesgados, incluso llegó el señor Fuset a no responder a preguntas de los periodistas». Estos datos que ofrece Crespo fueron solicitados a través de una nota interior dirigida a la Concejala de Protección Ciudadana, «para que indicara los datos de denuncias extraídos de los balances de las pasadas fiestas falleras».
El edil popular afirma que para conocimiento de la opinión pública, durante el balance realizado por ambas concejalías tras las fiestas falleras, «también se deberían haber facilitado en cada caso los motivos de las denuncias y si existe o se han incoado ya expedientes sancionadores», asegura. Crespo afirma que «el balance se contradecía de pleno con el que habían hecho los vecinos de la ciudad», ya que en palabras de los representantes de asociaciones de vecinos «Valencia se había convertido en un inmenso botellódromo que había derivado en diferentes altercados», sobre todo en barrios como Russafa o El Carme.
Menos altercados
Aunque la concejal de Seguridad Ciudadana, Sandra Gómez (PSPV), no ofreció esos datos tras las Fallas, la edil ya cifró en 35 las denuncias a carpas y casales falleros, ocho más que las que indica el grupo popular en el ayuntamiento.
Gómez apuntó que, durante las fiestas de la ciudad, se realizaron 58 detenciones, entre los que se encontraban siete carteristas. Una cifra menor a la del año pasado, donde se produjeron 80 detenciones en total. Además, la concejal cifró en 86 las sanciones por el mal uso de petardos y 22 denuncias por venta de material pirotécnico.
A pesar del balance positivo que realizó Gómez, esta apuntó a las quejas suscitadas por el consumo de alcohol en la vía pública como uno de los principales problemas de la semana festiva. Durante las fallas, el ayuntamiento permite la práctica del botellón, algo que la concejala de seguridad quiere revisar de cara a las próximas fallas.
El número de denuncias en verbenas pasó este año de 18 en 2015 a solo 3 estas fallas. Además, se produjeron 180 denuncias por venta ilegal de comida y se decomisaron 4.000 objetos por venta ilegal.
