El Mercat Municipal del Grau es un enfermo que el ayuntamiento mantiene casi con respiración asistida. Mientras el anterior equipo de gobierno fracasó en su intento de convertirlo en un recinto gourmet, el nuevo ejecutivo liderado por Compromís va a apostar por transformarlo en un centro de productos ecológicos y de kilómetro cero, en un nuevo intento de salvar este histórico espacio del barrio. Así, el próximo viernes 15 de abril el consistorio celebrará el «Mercat per a la terra al Grau», un mercado de producción agroecológica y local que recoge el testo de la iniciativa «De l'Horta a la Plaça», celebrada con gran éxito el pasado 31 de enero en la plaza del Ayuntamiento.
Se trata de una experiencia piloto para el Mercat del Grau que, de funcionar, podría consolidarse como futura oferta para este emblemático espacio donde, actualmente, resisten una decena de paradas. El «Mercat per a la terra al Grau» se enmarca dentro de las actividades de la «Trobada per la Terra 2016» organizada por la Plataforma per la Sobirania Alimentària del País Valencià y en la que colaboran las concejalía de Comercio y Horta.
El mercado será un esoacio donde los productores locales ofrecerñan de manera directa y sin intermediarios sus productos ecológicos y de temporada a la ciudadania.
Quienes acudan al Mercat del Grau encontrarán frutas y verduras frescas de temporada producidas de manera ecológica y en el entorno local, productos de pan y repostería, miel, mermelada, horchata, conservas, o productos de transformación directa. Además de la venta de productos habrá talleres infantiles y ñlos conciertos de Tomàs de los Santos y El Diluvi.
Prueba piloto el día 15
El concejal de Comercio, Carlos Galiana, confirma que la propuesta que se celebrará el próximo día 15 «es una prueba piloto para ver cómo funciona este tipo de producto en el Mercat del Grau, donde queremos potenciar precisamente un mercado de kilómetro cero».
Por su parte, la concejala de Horta i Pedanies, Consol Castillo, la soberanía alimentaria «promueve el comercio transparente, que garantiza ingresos dignos para los y las agricultoras, y los derechos de los consumidores para controlar su propia alimentación y nutrición».
