«Ha sido una reunión histórica». Así definía Laura Felip, alcaldesa pedánea de El Perellonet, el encuentro celebrado el pasado viernes con todos los alcaldes de las pedanías del sur de la ciudad de Valencia y sus asociaciones de vecinos y movimientos sociales. «Nunca antes se había producido una asamblea así, donde han podido hablar todos y donde hemos podido hacer un repaso a las principales deficiencias que atenazan a nuestros municipios», añadió.

Entre estas reivindicaciones se encuentra, por ejemplo, la de más educación y sanidad. En el primer caso, exigen más «escoletes» municipales para niños de 0 a 3 años. En el segundo, esta misma semana fueron noticia las alcaldesas de El Saler, El Perellonet y El palmar por pedir también un pediatra diario, pero la Conselleria de Sanitat les explicó que el censo tiene que ser de 900 niños mínimo para dotar de médico especialista a una población.

Para conseguir que todas estas iniciativas que demandan tanto vecinos como alcaldes sean una realidad, el primer paso es conseguir una Junta Municipal propia. «En estos momentos las pedanías del sur pertenecemos a la junta de Russafa. Evidentemente cuando vamos allí con nuestras peticiones es difícil encajar, porque ellos también tienen sus propias solicitudes históricas, como el parque Manuel Granero», detalla la alcaldesa de El Perellonet.

«Ya hemos dirigido a la concejalía de Jordi Peris (de Participación Ciudadana y Acción Vecinal) un escrito conjunto para pedir nuestra propia junta de distrito. Que se unan también los vecinos es una buena noticia, cuanta más presión, mejor», apostilló Felipe. Esta reivindicación no es solo de las pedanías del sur, los Poblats del Nord sienten la misma necesidad de contar con un organismo a través del cual puedan gestionarse.