El Ayuntamiento de Valencia, a través de la Concejalía de Agricultura, Horta i Pedanies, impulsará la modificación de las Ordenanzas que rigen la Junta de Desagüe de l'Albufera, que es el organismo que desde 1926 controla a través de las compuertas y más recientemente con sistemas de bombeo, el nivel de agua del lago.
El regidora Consol Castillo se reunió ayer con el presidente de la Comunitat de Pescadors de El Palmar, José Caballer, y la secretaria de esta entidad, Amparo Aleixandre, con los que trató la necesidad de modificar el reglamento que regula la Junta de Desagüe de l'Albufera.
Se trata de una iniciativa que ya impulsó Compromís en 2012 con Joan Ribó, Pilar Soriano y la propia Consol Castillo. Ahora, ya en el gobierno municipal, han retomado la cuestión porque consideran que la Junta de Desagüe ha de adaptarse a realidad actual del lago, no solo a las necesidades agrícolas, sino también a defender los intereses de los pescadores y garantizar la estabilidad medioambiental y el ecosistema de l'Albufera.
La ordenanza de 1926 está completamente desfasada, de hecho establece que para pertenecer a la Junta de Desagüe se ha de ser mayor de 25 años y poseer o disponer como mínimo de 20 hanegadas de tierra. En la práctica, el control del nivel del lago está en manos privadas. Así, la junta de gobierno, aunque está presidida por el Ayuntamiento de Valencia por ser el propietario del lago, no cuenta con representación de todos los sectores a los que actualmente les afecta el lago. Ni al Parque Natural, ni el Consell Agrari, ni Conselleria de Medio Ambiente?, de ahí que urge una puesta al día de la normativa y su órgano gestor.
La moción de Compromís exigía en su día que la gestión de los distintos sistemas de regulación del nivel de agua del lago (desembocaduras, compuertas, turbinas, etc) tenga carácter público, y además se respete y mantenga «la necesaria y periódica renovación hídrica y biológica del lago, manteniendo abierta su comunicación con el mar en la forma que se ha venido haciendo tradicionalmente».
En todo caso, explican los impulsores de la reforma, quieren que la ordenanza de 1926 se adapte a la normativa vigente y a la realidad actual, «así como las necesidades de renovación y supervivencia del ecosistema».
Compuertas cerradas
La ordenanza de 1926 establece que las compuertas de desagüe de l'Albufera deberán permanecer cerradas durante los meses de noviembre y diciembre, mientras que los diez meses restantes deben estar cerradas. Sin embargo, y según explica Compromís, en la actualidad se usan los sistema de bombeo instalados para regular el nivel del agua y en la práctica las compuertas permanecen cerradas más tiempo del establecido en la ordenanza, perjudicando al ecosistema y a especies como la angula o la llisa. Ahora, la Concejalía de Agricultura, Horta i Pedanies ha impulsado una comisión de estudio para el cambio de las ordenanzas en la que participarán todos los actores implicados, comenzando por la Comunitat de Pescadors de El Palmar.
