El recuperador de las danzas eucarísticas de Los Seises del Corpus, el profesor Rodrigo Madrid, estudiará representar el baile en otro templo o espacio tras el veto del Real Colegio Seminario de Corpus Christi, ya que el actual clero que rige la institución considera que «restan religiosidad» a la celebración.

Como viene informando este periódico, esta danza había sido recuperada hace seis años y desde entonces se venía representando tras un convenio entre Rodrigo Madrid y la institución. Hace ya un año, el anterior rector del centro, Juan José Garrido, tenía intención de que no se llevasen a cabo durante el cortejo religioso.

Rodrigo Madrid, quien junto a otros profesionales trabajó durante 10 años en la investigación y recuperación minuciosa de la música, la danza y la indumentaria, se mostraba ayer todavía sorprendido por la decisión.

En primer lugar explicaba que entiende que se trata de «una institución privada» que puede tomar las decisiones que crea oportunas, si bien él explicaba a este diario que no entendía qué ha llevado a esta situación. «Lo primero que debo hacer el asumir el disgusto...» reconocía Madrid, clavecinista, profesor de la Universidad Católica y director de la capella Saetabis.

Al ser preguntado sobre si van a dejar esta danza sin representación, indicó que «tendremos que ver si se puede hacer en otro lugar. Hay que pulsar distintos lugares que quieran acogerlo». Además, explicaba que en el Patriarca le ofrecieron «hacerlo como un concierto aparte, o la semana antes o la de después...pero ¿qué sentido tiene? Esas danzas nacieron para la procesión del Corpus».

«La ha cancelado por razones que se me escapan. Comprendo la molestia que pueda causar que cada vez más se llene el lugar con la gente y sus cámaras...quizá se pueda perder el recogimiento, la religiosidad», indicaba el estudioso de las danzas. «En un inicio realicé la petición para hacer las danzas y el Patriarca lo asumió y estaban encantados. Pero llegó un momento en el que decían que la gente únicamente iba a ver el baile y no al hecho religioso. Yo opino que esta danza engrandece el Corpus». «Se podría haber hablado y visto qué cambios hacer para que pudiera realizase con todo el público...», añadía Rodrigo Madrid.

Cabe recordar que las danzas, las cuales ya están documentadas en 1604, fueron presa de las prohibiciones en el pasado, primero por el arzobispo Juan de Ribera, fundador del Real Colegio Seminario y posteriormente, la última vez, por Veremundo Arias Teixeiro, arzobispo de Valencia, nombrado por el Papa Pío VII. Esta última prohibición ocurrió hace dos siglos.

Fue en el año 1966 cuando estas danzas eucarísticas fueron restauradas y llevadas a la representación con la coreografía de Vicenta Cuenca. Posteriormente, en 1972, se interpretaron ante el Santísimo Sacramento, dentro de los actos del VIII Congreso Eucarístico Nacional. Sin embargo, los primeros pasos para llevara cabo una recuperación fiel y de la mano de investigadores, se dio hace 19 años, cuando «La Festa del Corpus» apostó por recuperar esta danza del siglo XVIII para la procesión que recorre el «cap i casal» cada año. En 2002, Manolo Camarasa, presidente d la Federación de Folklore de la Comunitat Valenciana, llevó a cabo las primeras investigaciones y Rodrigo Madrid recogió el guante, viajando a Sevilla, desde donde fueron importadas por el patriarca Juan de Ribera. Las investigaciones de Madrid se alargaron a lo largo de años, y posteriormente se trabajó durante otros dos años en la confección de música, vestuarios y danza.

Rodrigo Madrid explica que participa en varios congresos profesionales en los que ha dado cuenta de la riqueza cultural de esta danza y que «se asombran del gran trabajo de recuperación que se ha hecho de esta música». «Por ahí no se creen que ahora no se vayan a representar cuando lo digo. No entienden cómo tras una década de trabajo no vayamos a hacerlo», sentencia.