El concejal del Ciclo Integral del Agua, Vicent Sarrià, visitó ayer las obras en ejecución de la tubería arterial potable que discurre por el paseo de la Petxina y que se realizan con el objetivo de mejorar la calidad del servicio, tanto desde el punto de vista de la presión como de la garantía de suministro a los barrios del centro y norte de Valencia.

Tal como explicó el edil durante el recorrido, «se van a sustituir dos tuberías, una que acumulaba 100 años, y la otra, de cerca de 50, por lo que se exigía una renovación, ya que se instalaron en los años 1905 y 1961, respectivamente, y ya han agotado su período de vida útil». De hecho, la actuación aparece recogida en el Plan de Inversiones de la empresa Emivasa, dentro del apartado de Mejora y Renovación de la red arterial de Valencia, con anualidades en 2015, 2016 y 2017. Su plazo de ejecución es de 24 meses. El concejal recordó que la inversión de esta actuación alcanza los casi tres millones y medio de euros, «ya que se renovará la ruta arterial de suministro de agua a la zona centro y norte de la ciudad», destacó.

Las zanjas donde se instalan las tuberías tienen unas profundidades comprendidas entre 1.70 y 4.50 metros, debido a la necesidad de cruzar varias acequias y colectores. La longitud de la tubería que se va a instalar es superior al kilómetro, con diámetros comprendidos entre 600 y 800 milímetros.

El concejal del Ciclo Integral del Agua explicó que esta actuación pretende «no solo garantizar la mejora de suministro, sino también garantizar que por cualquier incidencia o avería toda la zona norte de la ciudad no se quede desabastecida de agua».