Los concejales de fiestas presente (Pere Fuset-Compromís) y pretérito (Félix Crespo-PP) parecen haber elegido la jornada de viernes para intercambiar reproches. Si hace una semana fue Crespo quien denunció «oscurantismo» en el proceso de elección de la falla municipal, ahora es Fuset quien atacó a su rival político acusándole de mala gestión al asegurar que «en sus dos últimos años como concejal de fiestas hubo casi dos millones y medio de euros sin fiscalizar». Una réplica a otra crítica previa de éste. «¿Cómo explica las más de 500 facturas que no pasaron por la intervención y el control del Ayuntamiento en 2010 y 2011? ¿Tiene alguna manera de justificar por qué le parecen «irregulares» y «alarmantes» 130.000 euros cuando él dejó sin fiscalizar 1,149.693 euros públicos en 2010 y 1,219.931 en 2011? . Casi el 25 por ciento de su concejalía. El cinismo de Crespo y del PP no tiene límite. Han hecho exactamente aquello que critican pero en magnitudes increíbles para cualquiera que les escuche ahora.» aseguró Fuset, quien incluso puso como ejemplo a su predecesor en el cargo, Francisco Lledó (sin nombrarlo), al decir que «fácilmente redujo los importes sin fiscalizar de Crespo y nosotros ahora hemos logrado unos números aún mejores». No se trata de una práctica ilegal, pero Fuset critica que «que no lo sea no quiere decir que se convierta en una norma, como ocurría cuando Crespo tenía poder de decisión sobre el dinero público». «La señora Isabel Bonig tendrá que explicar si considera que esta oposición de gestos, trolas y cinismo es el trabajo que merecen sus votantes».

Dentro de este intercambio de reproches al que se someten uno y otro, el edil popular había denunciado 24 horas lo que considera falta de eficacia de la App municipal en el apartado de fiestas, al aparecer en algunos soportes con enorme retraso (tras celebrarse) los programas de algunas fiestas.