El colectivo ciudadano Fuera Túnel, que reivindica la pacificación del tráfico en la avenida Pérez Galdós, presentó ayer a los concejales de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi, y Desarrollo Urbano, Vicent Sarrià, un informe sobre la velocidad del tráfico y los niveles de ruido que soportan los vecinos que residen en el entorno de esta «autopista urbana». Las mediciones se llevaron a cabo el pasado mes de abril en el entorno del túnel de Pérez Galdós y Giorgeta para motivar la reclamación de medidas correctoras urgentes para acabar con la insalubridad a la que están expuestos los vecinos.

Las mediciones dejan en evidencia que en Pérez Galdós los niveles de ruido diurno y nocturno „que para zonas residenciales está fijado en la ley valenciana 7/2002 en 55 y 45 decibelios, respectivamente„ «se superan amplia y continuadamente». Las mediciones se llevaron a cabo entre los días 25 y 29 de abril y en franjas horarias distintas durante la mañana, la tarde y la noche y en cuatro puntos de medida distintos en las avenidas.

Incumplimiento sistemático

El límite de ruido diurno llega a situarse en algunos puntos de esta larga avenida en 92,3 decibelios, muy por encima de lo permito. En el punto de medición de Pérez Galdós con Giorgeta el nivel de contaminación acústica es tan sostenido a lo largo del día que ni los niveles de ruido mínimos (67,5 dB) están dentro de lo permitido.

Los vecinos destacan que la Ordenanza de Circulación es incumplida sistemáticamente en Pérez Galdós y Giorgeta, donde el límite establecido es de 50 kilómetros por hora mientras que la velocidad máxima dentro del túnel es de 40 kilómetros. Sin embargo, los valores medidos registrados superan en promedio los 60 kilómetros horas y llegan a valores máximos de 84 km./hora, tanto en la avenida como dentro del túnel.

Los vecinos aseguran que a la elevada velocidad de los vehículos a motor, se añade el gran número de los mismos que atraviesan la avenida (60.000 vehículos el pasado mes de abril) lo que «crea una atmósfera irrespirable» ante la cual piden medidas de choque como la reducción de la velocidad a 40 kilómetros en toda la avenida, la instalacioón de radares moviles y de paneles de ruido, así como la creación de un carril-bici segregado y medidas disuasorias para canalizar el tráfico por la ronda sur. Los vecinos aseguran que la ampliación de aceras que anunció recientemente Sarrià será insuficiente si no se toman otras complementarias.

Giuseppe Grzzi destacó al respecto que se están estudiando medidas, desde la instalación de más pasos de cebra hasta la supresión del túnel, para pacificar el tráfico en Perez Galdós. El concejal de Movilidad llegaba a calificar ayer de «punto negro» el túnel, así como su coste para incluirlas en los futuros presupuestos municipales de 2017.