El sindicato Comisiones Obreras ha puesto en conocimiento de la Agencia de Protección de Datos «el irregular uso de las cámaras de vigilancia» en el servicio de tributos del Ayuntamiento de Valencia y más concretamente el visionado de sus imágenes en la pantalla situada en el despacho de la jefatura del servicio.
Control permanente
El sindicato está convencido de que «la verdadera finalidad perseguida con esta medida es el control permanente de la actividad de la plantilla desde el despacho de la Jefatura del Servicio y no solo el control de afluencia de público». «Se trata —asegura— de una medida desproporcionada que la Jefatura del Servicio visualice todos los puestos de trabajo en la pantalla de su despacho, ya que hay agentes de Policía Local que controlan el acceso, personal subalterno que asiste al público en el uso de máquinas y mandos intermedios que pueden distribuir el trabajo entre el personal en función de la afluencia de público». Además, «hay que tener en cuenta que la jefatura del servicio dispone de un programa informático que le proporciona información en tiempo real de los flujos de acceso a las diferentes mesas de atención al público».
Precedentes
Según Comisiones Obreras, la propia Agencia de Protección de Datos, en sus informes jurídicos de casos análogos, reconoce que «no existe legitimación para controlar la actividad laboral de los empleados públicos».
«El Ayuntamiento debería, según la normativa, hacer constar en la inscripción de ficheros de videovigilancia de la Agencia la doble finalidad de control laboral», dice el sindicato, según el cual, «el ayuntamiento debería haber informado al personal funcionario y laboral de la existencia de cámaras y monitores con la doble finalidad de control laboral».
