La remodelación de líneas de la EMT ha encallado en la línea 11, que tiene enfrentados a un grupo de vecinos con la concejalía de Movilidad. Ayer, como ya hiciera hace unas semanas, el primer teniente de alcalde de Valencia, Joan Calabuig, volvió a interceder por el colectivo de la tercera edad, reclamando a la EMT que respete los derechos de las personas mayores (área que él gestiona) y no se modifiquen las paradas del 11. Con el cambio, en lugar de bajar en el centro de salud de Pintor Vilar, ahora deberían hacerlo en la calle Almassora después de cruzar la calle Alboraia y las vias del tranvía lo que, en opinión de un grupo de vecinos mayores, se pone en riesgo la seguridad. Argumentación que no ha hecho variar a la dirección de la compañía municipal, que se mantiene firme en hacer la modificación.

LA EMT esgrime que el nuevo trazado beneficiaría a dos mil personas frente a las 90 que bajan en el centro de salud de Pintor Vilar, que verían trasladada su parada. Además, con este cambio se ganarían unos cuatro minutos de trayecto. El socialista Joan Calabuig aseguraba ayer que, sin ánimo «de crear polémicas», el primer criterio de un servicio público «es atender a vecinos y vecinas, y tienen que tener en cuenta sus derechos y su bienestar». «Otras factores como los tiempos, los costes no son la prioridad número 1 de un servicio público, aunque obviamente un servicio público ha de ser eficiente, ser austero y no tener gastos excesivos», justificó. «Desde mi posición de responsable de Personas Mayores creo que hay un orden de prioridades y creo que valdría para cualquier otro aspecto. No tendría lógica que un paso de peatones de un centro escolar fuera suprimido solo porque con eso un autobús o cualquier servicio público gana unos minutos. Y este ejemplo me sirve igual para las personas mayores», señalaba.

Insistía en que no es «una justificación razonable» ganar cuatro minutos «frente al riesgo de empeorar un trayecto para las personas mayores». Calabuig iba más lejos al echar mano del lema de Compromís (que gestiona el área de movilidad) para ser más convincente: «Gobernamos para todos y gobernamos para aquellos que más necesidades tienen. Si no tenemos esa jerarquía de valores, ¿cuáles son los de un gobierno progresista? Aquí hemos dicho que hemos venido a rescatar personas».

Una carta para Ribó

Calabuig hizo estas declaraciones en la presentación de la campaña «Buen trato a las personas mayores», organizada con motivo del Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso del Maltrato a las Personas Mayores. El Centro de Mayores de Orriols aprovechó para entregar al alcalde una carta con sus reivindicaciones al respecto de la línea 11.

Campaña para sacar a la luz el maltrato a los mayores

Las concejalías de Personas Mayores y de Protección Ciudadana del Ayuntamiento de Valencia trabajarán conjuntamente en un plan para informar y dar a conocer entre las personas mayores «los posibles casos de maltrato que no salen a la luz porque no hay conciencia de ellos». Representantes de los grupos políticos municipales conmemoraron el Día Mundial de Toma de Conciencia del Abuso del Maltrato a las Personas Mayores y Joan Calabuig apro vechó para recordar la aprobación en el pleno municipal de la entrada de la capital valenciana en la red mundial de ciudades amigables con las personas mayores, «precisamente para garantizar estas condiciones de vida en Valencia».