El Ayuntamiento de Valencia ha puesto en marcha una campaña de esterelización de gatos callejeros para tratar de controlar las alrededor de 500 colonias (unos 5.000 gatos) que hay en la ciudad. Según ha explicado la concejala de Binestar Aninal, Gloria Tello, la idea es que los voluntarios que alimentan a estas colonias rescaten a 250 hembras y las lleven a algunas de las 13 clínicas veterinarias con las que han firmado un convenio para que las esterilicen. Posteriormente, esos mismos voluntarios las devolverán a las colonias de las que salieron.

La concejala también ha anunciado su intención de construir una perrera más grandes para dar cabida a los cientos de perros y gatos que se acumulan en el actual recinto de Benimàmet. Tello asegura que este proceso, que necesita de un solar con la declaración de núcleo zoológico, puede tardar algún tiempo, pero entre tanto tiene previsto hacer un nuevo concurso para adjudicar el refugio actual con unas condiciones más rigurosas. Tello asegura que la empresa actual, Modepran, no está cumpliendo con el requisito de tener un refugio alternativo „el de Carlet está vacío, dijo„ y quiere hacer una nueva adjudicación más exigente mientras que se construye un nuevo refugio.

Precisamente hoy el Partido Animalista contra el Maltrato Animal (PACMA) ha presentado en el Ayuntamiento de Valencia cerca de un millar de firmas que instan a la puesta en marcha "urgente" del Plan de Esterilización Felina (PEF) porque la situación se ha vuelto "totalmente insostenible". Precisamente, la concejala de Bienestar Animal, Glòria Tello, acompañada de la diseñadora de la campaña, Lina Vila, presenta esta mañana el "Plan Colonial Felino" en el jardín Botánico.

La petición está avalada por firmas de vecinos censados en la ciudad que están descontentos con la situación que sufren el voluntariado y los gatos de las colonias de la ciudad y por ello piden que se adopten "medidas éticas" para el control de las colonias de gatos. Se calcula que en Valencia, y según datos de la concejalía de Bienestar Animal, existen 500 colonias felinas.

El PACMA denuncia en un comunicado que cuando se cumple un año de la creación de la concejalía de Bienestar Animal, y "después de las promesas y anuncios fallidos" por parte del Ayuntamiento, la situación de las colonias de gatos "se ha vuelto totalmente insostenible y miles de ellos están pariendo desde febrero, lo que ha desbordado al voluntariado".

"El PEF, o CES (captura-esterilización-suelta), debería haberse cerrado hace meses, pero después de un año seguimos esperando una reacción que no llega por parte del Ayuntamiento", asegura Raquel Aguilar, coordinadora de PACMA a València.

Recuerda que hace más de un mes el Ayuntamiento anunció la puesta en marcha del PEF con un presupuesto de 20.000 euros, una cantidad tres veces menor de la que destinaba el anterior gobierno del PP hasta la eliminación del programa en 2009.

Esta cantidad económica ha sido tachada de "insuficiente" desde el Partido Animalista y otras asociaciones que se dedican a cuidar las colonias felinas.

Además, según denuncian desde el PACMA, "es inviable que con esa cantidad de dinero se esterilicen las 500 colonias de la ciudad, como aseguró el Ayuntamiento, ya que imaginando que hubiera solo cinco gatas por colonia, la esterilización de cada animal costaría 8 euros, un precio imposible".

En el documento entregado hoy en el Ayuntamiento se insta a los responsables políticos a la "aplicación inmediata" de un PAF "adecuado, que incluya la esterilización de machos y hembras para tener las poblaciones controladas".

También solicitan "ayudas económicas para la alimentación necesaria y los cursos veterinarios, y el compromiso de destinar espacios municipales para que los animales puedan vivir sin riesgos".

El PACMA considera que el Plan debería incluir la colaboración y ael apoyo a la labor del voluntariado y la sensibilización del resto de partes implicadas (vecinos y personal municipal).

"Tal y como indica la Organización Mundial de la Salud (OMS), es la única solución, tanto desde el punto de vista ético como económico para dignificar la vida de estos animales, muchas veces invisibles, dignificar el trabajo a sus cuidadores y evitar conflictos vecinales", afirma Aguilar.