El Partido Socialista dejará libertad de voto hoy en el pleno municipal que ha de abordar la prohibición del «bou embolat». Da así marcha atrás en su intención inicial de imponer la disciplina de voto, ante las voces discordantes dentro del grupo municipal. Uno de los concejales socialistas, Ramón Vilar, es un taurino confeso, que abogó desde un principio por mantener los festejos. Como el Partido Popular, que presentó una moción que finalmente se debatirá en la sesión de esta mañana. Para no apoyar al PP, Vilar se ausentará del hemiciclo en el momento de la votación. El resto de compañeros apoyarán la iniciativa impulsada por el sector animalista del tripartito y que entrará en vigor mañana, 1 de julio, en las pedanías y la plaza de Toros de Valencia. Nueve ediles de Compromís, cuatro del PSPV y tres de València en Comú respaldarán la prohibición. Los diez del PP votarán a favor de mantener los festejos y también los seis de Ciudadanos. De darse un empate, el voto de calidad del alcalde decidiría.

Ciudadanos anunció ayer que presentará una enmienda alternativa, en la que propone que se establezca «una moratoria hasta el 1/1/2017 y durante este periodo, no más tarde del mes de septiembre, se abrirá un debate social donde participen todos los agentes implicados con el fin de llegar al máximo consenso». La formación que encabeza Fernando Giner, además, hacia ayer hincapié en que se compromete «a reforzar todo tipo de medidas para garantizar el buen trato y la integridad del animal, cumpliendo de la normativa vigente y fomentando actitudes cívicas de los participantes y organizadores del festejo». En cualquier caso, y tras ser acusados de ambigüedad, ayer despejaban cualquier duda al asegurar que secundarán la moción del PP si estos a su vez apoyan su enmienda. Iban un poco más allá, al explicar que están «en contra del maltrato animal, pero tampoco son partidarios de las prohibiciones» en temas tan delicados sin tratar de alcanzar algún tipo de consenso.

En cuanto a los socialistas, recalcaban que son un partido plural y que no impondrán ninguna directriz. Al tiempo que insistían en que tampoco darán la razón al Partido Popular con un voto en contra del tripartito. Vilar se ha mostrado desde el principio abiertamente favorable a respetar lo que considera «una tradición propia» como son tanto el «bou embolat» como el «bou en corda».

Concentración en la plaza

El debate de hoy se prevé tenso, dentro y fuera del hemiciclo. Desde el PSPV se reclamó a sus socios de gobierno local una prórroga hasta noviembre, para que las pedanías pudieran llevar a cabo sus fiestas y respetar los contratos firmados. Algo a lo que se opuso con contundencia el alcalde Joan Ribó. Así, taurinos y antitaurinos se han citado a las puertas del consistorio para exhibir sus posturas. Las peñas taurinas han anunciado ya movilizaciones y denuncias ante los tribunales para que se respeten sus fiestas.