«El patrimonio se ha de proteger, cuidar y conservar» advirtió ayer el concejal de Gobierno Interior, Sergi Campillo, tras la visita a algunos de los edificios incluidos en el plan de alquerías del Govern de la Nau, entre los que se incluyen el Casino del Americano, las alquerías de la Torre y El Moro y la fábrica de la Ceramo, todos en el el barrio de Benicalap. Cuatro edificios de pasado señorial que están en la lista roja del patrimonio histórico amenazado, especialmente, el Casino del Americano, una villa indiana única que ha tenido que ser apuntalada, pero también la alquería de la Torre, de la que se han estado retirando toneladas de desechos y basura.

El ayuntamiento ha incluido 15 edificios en este plan de intervención de alquerías dotado con cerca de 400.000 euros.Una cantidad insuficiente para restaurarlos pero sí para frenar el deterioro, mantenerlos y dejarlos preparados para la restauración. Algo inabarcable en esta legislatura. «En tres año no se podrá rehabilitar todo porque han sido muchos años de abandono», declaró Campillo, quien destacó que solo la rehabilitación integral de la Alquería del Moro costaría 2,5 millones de euros. Ante la ingente cantidad de alquerías y patrimonio histórico por salvar, Campillo abogó ayer por no construir nuevos equipamientos mientras haya patrimonio por reutilizar. «Antes de construir nuevas infraestructuras y equipamientos, se deben restaurar estos edificios singulares que remiten a nuestra historia o a nuestro pasado industrial, para convertirlos en los equipamientos públicos que los barrios donde se encuentran necesitan».

«Es lamentable que un patrimonio tan valioso se haya dejado degradar tanto» apuntó el concejal durante la presentación del plan de intervención a través del cual se han realizado tareas de extrema urgencia en algunos casos por su avanzado estado de deterioro, como en el Casino del Americano, que han incluido limpieza, desescombro y refuerzo estructural. El plan incluye 15 alquerías o edificios municipales de valor patrimonial y social que está previsto rehabilitar en un futuro y a los que se quiere dar un uso público. Se trata de las alquerías de Albors, la Torre y el Moro, el Casino del Americano, el Chalet de Sancho, la calle Ifach, la calle de La Sangre, el antiguo almacén de maderas Viuda del Olmo, otro edificio en la calle Aben Al Abbar, La Ceramo, la Antigua Casa de Cala, las fábricas de la calle Lliria y la Casa del Relojero, en la turística calle del Micalet.

Campillo visitó ayer el Casino del Americano, la Alquería de la Torre, la Alquería del Moro y la antigua fábrica La Ceramo, que se destinará a uso público. El concejal no descartó la posibilidad de abrir a la inversión privada este patrimonio y recordó las intervenciones que se han llevado en esta línea en el Colegio de la Seda y en la fábrica de Bombas Gens.

Campillo anunció que el ayuntamiento seguirá interviniendo en el futuro con actuaciones similares, porque no podemos consentir que se deteriore un patrimonio público tan valioso y que en algunos casos como el de la Alquería del Moro, existe una declaración como Bien de Interés Cultural o se trata de alquerías cuya construcción se remonta a los inicios de la conquista de Jaume I.