El Ayuntamiento de Valencia va a rescatar del olvido el refugio antiaéreo de la calle Serranos, construido en 1938 en plena Guerra Civil española, y en estado de abandono total desde hace más de una década. A finales de año está prevista su apertura al público para que todos los que deseen puedan visitarlo, al igual que el que existe en el subsuelo de la Casa Consistorial, que también se está rehabilitando.

La concejalía de Patrimonio Cultural, que dirige Glòria Tello, ha encargado los trabajos previos a al rehabilitación, un estudio arqueológico y en tres dimensiones que sirva de base para devolverlo a su estado original. En su recuperación, se trabajará mucho en el cromatismo que exhibía hasta que una falla lo ocupó como local y borró parte de su historia. Las letras «Refugio» de la fachada principal volverán a su rojo original, mientras que en su entrada posterior serán de color azul. Estos tonos predominaban también en el interior, con un diseño sencillo, austero y funcional para refugiarse de los bombardeos de las tropas franquistas.

Las catas arqueológicas también están sirviendo para analizar la estructura y detectar problemas como goteras u otros desperfectos. Para devolverlo a su origen se han recopilado notas de prensa, fotografías y documentos de la época. En la Valencia republicana se construyeron unos 200 refugios, entre públicos y privados, de los que ya quedan muy pocos.