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Entrevista

Pere Fuset: "Nos desespera la lentitud del ayuntamiento. En septiembre se verán los frutos de muchas gestiones"

Señala que en Valencia «podemos sacar pecho» al ver «la imposibilidad de diversos partidos en Madrid para ponerse de acuerdo»

Pere Fuset.

Pere Fuset contesta a la entrevista días antes de la marcha del socialista Joan Calabuig del Govern de la Nau. Un gobierno que dice «se ha mostrado estable y plural», que «se arremanga» para rehabilitar «una casa en ruinas».

¿Qué valoración hace de la Fira de Juliol? ¿En qué está más satisfecho y qué se puede mejorar?

De lo que más satisfecho estoy es de la unanimidad en la valoración positiva y de la espectacular respuesta del público. Había gente que estaba excluida de esta feria, hasta el punto de que incluso ni la conocía. Posiblemente algunas generaciones tenían el recuerdo de aquella feria de los pabellones de hace muchos años, pero muchísima gente de otra generación, de mi quinta, desconocía la feria. Como mucho, el público fallero asistía a las preselecciones, a la programación que se hacía en el Palau de la Música o la Batalla de Flors, pero lo que ha pasado este año no se había visto en décadas. Acostumbro a recorrer los actos para comprobar como funcionan y siempre ves pequeñas cosas que se pueden mejorar. Pero creo que hemos dado con el modelo de Fira que ha conseguido la unanimidad en la valoración positiva de la gente.

Félix Crespo dice que ha sido la Fira más cara de la historia y ha denunciado «fraccionamiento de facturas» en las contrataciones.

Delante de cada acto administrativo siempre hace la misma acusación. Si tuviese razón en alguna yo creo que ya tendría que estar en Guantánamo... pero no es así. Todas las contrataciones se hacen de acuerdo con la legalidad y además en este caso hay una fiscalización previa, un interventor que así lo avala. Sobre el presupuesto, es cierto que lo hemos incrementado, que por cierto es inferior al de algunos años en los que Crespo fue concejal. Pero él además, suma conceptos imposibles. Le ha faltado sumar el gasto de las farolas, la policía o el transporte público... Hemos sumado recursos frente al año pasado, pero sobre todo hemos multiplicado los resultados. Y esa suma ha permitido pagar mejor a los trabajadores que ponen las sillas, a los artistas falleros, tal y como reivindicaban por la carrozas, ampliar la Batalla de Flors, llevar la Fira a cada barrio, dinamizar el calendario pirotécnico... Además han tenido un gran retorno. El propio sector turístico o el de la hostelería han valorado muy positivamente los resultados que ha dado esta feria.

En noviembre la Unesco decidirá si las Fallas son Patrimonio de la Humanidad ¿Qué le dice el corazón?

El corazón me dice que esta fiesta se lo merece y lo vamos a conseguir. La cabeza me pide ser prudente. Hay un trabajo que viene de lejos y ahora mismo lo que está haciendo este equipo es difundir el contenido de esa candidatura. Es cierto que la candidatura se presentó hace tiempo por parte de conselleria aunque el ministerio no la formalizó hasta el año pasado. Creo que lo mejor de todo es el camino, que es lo que te permite poner en valor la fiesta como patrimonio cultural y destacar sus elementos. A partir de ahí cruzaremos los dedos, pero yo no tengo ninguna duda de que esta fiesta se lo merece.

¿Qué valoración hace de su gestión en el mundo fallero este año? En la asamblea de presidentes alguno sigue sin darle tregua...

Tengo la percepción de que conecto muy bien con la base del mundo fallero, que son la gran mayoría. Hay más de 100.000 falleros y el mundo fallero es muy diverso. Mucho más de lo que algunos que se presentan como guardianes de las esencias, las fiestas y las tradiciones querrían creer. Que haya conflictos en el primer año creo que es lógico, pero si miramos cuáles son, siempre han sido cuestiones políticas. En las cuestiones falleras siempre nos hemos puesto de acuerdo. Hemos potenciado el diálogo y llegado a acuerdos históricos como el jurado de las falleras mayores, que ha sido votado casi por unanimidad, con solo dos votos en contra. En todo caso, también es normal que cuando en las propias reuniones de ejecutiva del PP trazan como prioridad convertir las fiestas en arma política y continuamente están con el mantra de «se van a cargas las fiestas» alguna gente nos espere con trabuco. Curiosamente han tenido que cambiar el discurso cuando el Museo Fallero no solo es oficial sino que se ha reformado, cuando hemos restaurado las Rocas, llevado la Exposición del Ninot de una carpa a un museo, o después de que las Fallas tengan una cobertura de TVE. Han pasado de decir que nos las íbamos a cargar a que son un derroche. Creo que eso evidencia cuál es su estrategia.

¿De qué medidas del gobierno municipal está más satisfecho?

El Govern de la Nau se ha mostrado como un gobierno estable y plural. La gente habló hace más de un año y dijo que no solo quería desalojar al PP sino que quería un gobierno progresista y que fuera plural. La pluralidad, obviamente siempre puede costar, pero en el gobierno de Valencia los posibles conflictos siempre se han dirimido con diálogo. Por poner un símil, lo primero que hemos hecho ha sido entrar en una casa en ruinas, ponernos el casco, arremangarnos y rehabilitarla; buscar las cosas más urgentes , como es la emergencia social. Se ha aumento el gasto social en un 47% , se ha llegado a acuerdos para que no haya desahucios bancarios o que no se corte la luz o el agua a quienes no pueden pagarlo. Muchas de estas cuestiones demuestran que la gestión es buena. El pago a proveedores o la reducción drástica del déficit así lo demuestran y confío en que en este segundo año los frutos van a ser más visibles.

¿Qué tal la convivencia? Porque obviamente cada partido quiere vender su gestión a sus votantes, ponerse sus medallas.

De manera razonablemente satisfactoria. Si ves lo que está pasando en Madrid y la imposibilidad de diversos partidos por ponerse de acuerdo y ves cómo de fácil está siendo en Valencia, puedes sacar pecho. Es mucho más fácil gobernar con mayoría absoluta y vara de mando, con una exalcaldesa que decidía hasta el color del Puente de las Flores. Pero la pluralidad requiere diálogo y ha de ser constante. No va estar nunca exento de conflictos por descontado, pero creo que la ciudadanía sabía lo que votaba, y que la nueva política es precisamente eso, diálogo y pacto. Son valores positivos.

La prohibición del «bou embolat» y el «bou en corda» son medidas «made in Compromís». ¿Una decisión valiente o arriesgada?

Nos presentamos a las elecciones con el lema «Amb valentia» y con un programa electoral en el cual estaba la eliminación de esos festejos que suponían un maltrato animal evidente. Que yo sepa a día de hoy los «bous al carrer» siguen siendo una realidad pero creo que para pasarlo bien no hace falta prenderle fuego a los cuernos del toro.

El Tribunal Supremo no ha apreciado delito en las facturas de Rita Barberá que denunció Compromís, el conocido como «Ritaleaks». ¿Cómo valora esta decisión?

Lo primero que hace esto es confirmarte el por qué la señora Barberá quiere ser aforada y depender siempre de las decisiones del TS. En cualquier caso, obviamente lo tenemos que respetar. Pero pensamos que esos gastos desorbitados en berberechos gourmet, bebidas alcohólicas, limusinas u hoteles de lujo para ella y sus acompañantes, más allá de si son constitutivos de delito son absolutamente inmorales, porque se producen en el tiempo en el que la ciudad más ha sufrido por la crisis. Esta semana se confirmaba que se ha archivado la denuncia que se había hecho a Ribó por participar en un encuentro junto a otros ayuntamientos. El alcalde fue valiente y dijo que si era imputado dimitiría. La señora Barbera ha sido imputada y todavía no ha dado ni la más mínima explicación.

¿Qué llegará tras el verano? ¿Qué iniciativas se tomarán?

Los ritmos en el ayuntamiento son lentos, extremadamente lentos, y es una de las cosas que más nos desespera a quienes estamos gestionando, muy especialmente en la ciudad postcorrupta en la que ahora mismo los funcionarios miran con lupa cada paso que dan. Septiembre será el momento en el que muchas gestiones que se han hecho comenzarán a fructificar. Será en cuestiones como el Cabanyal, un barrio degradado de forma programada durante 24 años y que necesita con urgencia las actuaciones que comenzaremos a ver . También se irán viendo novedades en eficiencia energética, medidas con impacto social, o esperamos ver como se hace realidad el parking de Brujas. Otoño supondrá para nuestra política una primavera.

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