Este año el ayuntamiento ya había incrementado el número de palcos respecto al año pasado, pero un error de la empresa que se encargaba de la venta a través de internet hizo que aún se ofrecieran más. Sin embargo finalmente se han acabado por vender todas, por lo que la pregunta era si dada la respuesta del público se podría tomar la oferta «imprevista» de este año como punta de partida de 2017. El concejal de Cultura Festiva, Pere Fuset, aseguró que esta multitudinaria asistencia «nos hará planteamos si se estabiliza» ese número de palcos. Fuset se mostró muy contento de cómo ha marchado la Fira y destacó que este año ha llegado «a perfiles muy diferentes», extendiéndola a otros barrios y «valencianizándola» con artistas de la Comunitat.