La presidenta de la Federación de Asociaciones de Vecinos, María José Broseta, tiene muy claro donde deben estar los límites en la ley: «en un bloque de viviendas no pueden alquilarse habitaciones. Nadie puede negarle el derecho a un propietario a alquilar su vivienda. Eso es una actividad económica. Pero alquilar una habitación tiene muchas posibilidades de ser sinónimo de ruidos y molestias. Si: puede haber huéspedes que acudan a un curso o a un congreso, pero sabemos que el margen de riesgo es grande. Y no puede primar el ocio sobre el descanso»