La Marina Real Juan Carlos I batió en el pasado mes de julio su récord de ocupación desde que está instalación comenzó a operar, con 17.025 pernoctaciones y un aumento del 18,67% con respecto al mismo mes de 2015, según datos facilitados por el Consorcio Valencia 2007. Y eso a pesar de que el verano no es precisamente la mejor época para la dársena de Valencia, pues una gran parte de las embarcaciones con base en el «cap i casal» se dirigen a otros puertos, principalmente las islas del Mediterráneo, para las vacaciones estivales. Agosto marca el punto más bajo en cuanto a nivel de ocupación, aunque el aspecto de los pantalanes no muestra este bajón de temporada.

Los buenos números que ha conseguido la Marina Real en julio confirman la tendencia positiva de la primera mitad del año, ya que en los siete primeros meses del 2016 las pernoctaciones registraron un crecimiento del 12%, mientras que la facturación aumentó en un 11%. Estas cifras, unidas al récord absoluto de ocupación cosechado en julio, consolidan el rumbo del Consorcio Valencia 2007, que trabaja con la perspectiva de futuro de aumentar el número de amarres de los 800 actuales a 1.400 puntos de atraque y construir un varadero que atraiga a un mayor número de embarcaciones, principalmente lo que se denomina destino en situación, es decir, una base invernal para todos aquellos que en verano se desplazan a destinos con mayor atractivo turístico.

Pantalán central

En cuanto a las grandes esloras, al término del mes de julio había 21 embarcaciones en el pantalán central de la dársena, lo que supone una ocupación del 50%, una cifra «muy buena para los meses en que nos encontramos, en las que las grandes embarcaciones se van a las islas del Mediterráneo», señalan fuentes del Consorcio Valencia 2007.

En la actualidad el 67% de las embarcaciones de la Marina Real tienen entre 10 y 20 metros de eslora; el 25 % son de menos de 10 metros y un 8 % presentan una eslora mayor de 20 metros. Por procedencia, en los últimos meses ha aumentado el número de embarcaciones procedentes de otros países, en especial de Francia, Reino Unido y Benelux (Bélgica, Holanda y Luxemburgo).

También hay que destacar que aproximadamente la mitad de los barcos atracados en la dársena son de propietarios con residencia en Valencia o sus alrededores, mientras que un 20% son del resto de España y un 30% corresponden a embarcaciones procedentes del extranjero.