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Sanciones

Las multas a las contratas de la limpieza se cuadruplican con el tripartito

Los inspectores del ayuntamiento ponen 83 multas leves y graves en año y medio frente a las 61 impuestas entre 2012 y mayo de 2015

Una máquina barredora por una calle del centro de Valencia. m. m.

Las quejas ciudadanas por la falta de limpieza de las calles de Valencia no cesan y así quedó en evidencia hace una semana en el debate del estado de la ciudad, donde el alcalde, Joan Ribó, se defendió de las críticas asegurando que la limpieza es una prioridad del Govern de la Nau (Compromís, PSPV y València en Comú) y en esta línea se están realizando inspecciones y sancionando por incumplimiento del pliego de condiciones a las contratas. Las estadísticas sobre la fiscalización que está llevando a cabo el ayuntamiento a las empresas que gestionan la limpieza y recogida de basuras en la ciudad (FCC, Sociedad Agricultores de la Vega y Secopsa) evidencian que en un año y medio las sanciones a estas empresas casi se han multiplicado por cuatro.

Según los datos que maneja la Concejalía de Medio Ambiente que gestionan Pilar Soriano, de Compromís, en los quince meses de gobierno del tripartito se han impuesto 83 multas, mientras que, entre 2012 y mayo de 2015, el anterior gobierno del PP impuso 61. La media de multas por incumplir las obligaciones recogidas en el contrato de limpieza por parte del tripartito se sitúa en 5,5 al mes, frente a las 1,4 del anterior gobierno, que ahora arremete desde la oposición por la suciedad en las calles de la ciudad.

Penalizaciones de hasta 750 euros

La mayoría de sanciones impuestas son leves y graves que comportan una penalización económica de hasta 300 euros, en el primer caso, y de 301 a 750 euros en el segundo caso. La contrata que más sanciones ha recibido es Secopsa, que controla la zona del Marítimo, donde existen barrios especialmente problemáticos con la recogida de la basura y la limpieza como el Cabanyal.

El incumplimiento del pliego de condiciones es uno de los argumentos que esgrime el actual ayuntamiento a la hora de anular contratas como la de la grúa municipal.

Para hacer frente a las quejas vecinales y de la oposición por la suciedad de las calles la concejalía ha ido ampliando los recursos de personal y económicos en los servicios de limpieza. La semana pasada, el gobierno municipal hizo una modificación de crédito para inyectar 2,5 millones de euros a limpieza. El año pasado se destinó un millón de euros al denominado Plan de Choque de Limpieza, que puso el acento en el Cabanyal. Tras años de recortes en las partidas para limpieza, Soriano se ha comprometido a seguir incrementando los recursos en los próximos años así como a exigir a las contratas la optimización de los recursos humanos.

El presupuesto municipal de 2016 destinaba 60 millones a la recogida de la basura y limpieza. Las contratas que controlan este servicio, un negocio de 900 millones de euros que se adjudicaron en 2005 por 15 años y un presupuesto anual de 63 millones de euros, pidieron a principios de año diez millones de euros más para prestar el servicio.

Entre las deficiencias detectadas en las inspecciones del ayuntamiento, unas de oficio y otras previa denuncia ciudadana, se han detectado incumplimientos, los más repetidos las deficientes en determinadas calles, el mal estado de los jardines y la falta de vaciado de las papeleras.

El gobierno municipal asegura que las auditorias trimestrales que se realizan a las contratas indican que «se ha mejorado en los niveles de limpieza „hay menos residuos en la calle„ si bien hay un «estancamiento de los niveles de generación de suciedad en los últimos años». La Concejalía de Medio Ambiente ha puesto en marcha en este sentido una campaña de concienciación ciudadana.

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