El Equipo de Gobierno municipal propondrá hoy en el pleno una línea de subvenciones y ayudas directas, amparadas en la promoción turística, para los comercios a los que se les subió el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) el año pasado. De esa manera se mantiene la subida de este impuesto a los establecimientos cuyos locales tienen un valor catastral superior a 250.000 euros y se atienden también las peticiones del Grupo Socialista, que quería relajar esa subida en consonancia con lo que pedían las asociaciones de comerciantes. Sería luego, en las bases de esas ayudas, donde se detallarían los comercios que pueden recibirlas, entre los que estarán probablemente los culturales y los históricos.

Por otro lado, el Grupo Popular ha presentado al pleno una moción para que la denominación del municipio de Valencia se mantenga en las dos lenguas oficiales.

Esta iniciativa será defendida por el concejal Cristóbal Grau, quien explicará en su intervención que el gobierno municipal ha pretendido imponer el nombre de Valencia en valenciano «sin que en el expediente administrativo abierto para tal fin conste ni un solo informe técnico que justifique este cambio». El edil ha recordado que en el pleno del mes de julio el Grupo Popular ya advirtió al alcalde, Joan Ribó, que no podía desestimar las cinco alegaciones presentadas al cambio de nombre de la ciudad sin que ningún técnico o experto avalara esta decisión, porque «estaba cometiendo una irregularidad administrativa grave que podría dar lugar a un contencioso y estaba faltando al respeto a entidades culturales históricas de Valencia, que son una voz autorizada y de prestigio para opinar sobre este tema».